Serví el almuerzo en la sublime
circunferencia de tu ombligo.
Puse las copas entre panes tiernos
como las tiernas manos de un niño.
En compoteras serví cerezas
sangrantes como corazones heridos.
Higos de Esmirna, nueces, dátiles,
damascos secos y pasas de Corinto,
almendras, aceitunas, paltas
y una botella de vino tinto.
Platos de cristal ahumado, cucharas,
tenedores y relucientes cuchillos.
Un salero de nácar como espuma
y servilletas de terso lino.
Debajo de aquel banquete,
sobre tu piel, extendí un camino
blanco, como una nube, de etéreo encaje
con un bordado en el dobladillo.
Asenté un florero entre los manjares
y en agua dulce dejé dos lirios
de tallo esbelto como tus piernas,
de fauces anchas, largos pistilos,
que se combaban para admirarte
con sus dos párpados amarillos.
Sobre la fuente labrada en plata
el sol de bronce puso su brillo
reverberando dorados tonos
sobre el pellejo morado y fino
de las ciruelas y los duraznos
que me incitaban a dar mordiscos.
Y fue una fiesta aquella tarde
para mis labios y mi apetito.
Porque en tus muslos comí las frutas,
entre tus piernas me bebí el vino,
rodaron ebrios los tenedores
hasta enredarse con los cuchillos.
Porque después de comerte a besos
cuando la luna me vio contigo
aquel camino de etéreo encaje
se volvió sábana que nos dio abrigo
y por almohada, bajo tu nuca,
después de amarte, puse los lirios.
Muy musical Salvador este intento de romance de amor sensual en asonante. Pero el tributo del verso rimado tiene una serie de exigencias para ser completo; sino el resultado es mera aproximación sin llegar a culminar. Y me explico: Tus versos no guardan métrica, decasÃlabos, endecasÃlabos, dodecasÃlabos, aleatoriamente. La rima en “i-o†es unas veces consonante y otras asonante lo que desluce el poema. Y por último te diré que has ido cogiendo el gusto y el ritmo a medida que profundizabas en el poema, porque los primeros versos son más amorfos y flojitos.
El intento es bueno, la confección deficiente, el tema muy recurrido ya y el resultado sólo regular, aunque tiene musicalidad y se deja leer con agrado.
Un saludo con mis mejores deseos para tu trabajo.
Suscribo las palabras de Ana Cardo; el poema hubiera necesitado que lo trabajaras un poco más.
Pues a mà me ha encantado tu poema Salvador; gozan de una pasión infinita tus versos. Bravo¡
Salvador: Tu poema es como un jardÃn paradisÃaco que embota los sentidos. Exuma pasión en cada palabra, llena de imágenes frutales desde el principio hasta el fin.
Celebro esa libertad desbordada.
Si fuese perfecto en rima y métrica, perderÃa aroma, fantasÃa y luz…
SerÃa un jardÃn de plástico.
Sigue libre, aunque te acorralen.
Bueno, si vamos a medir los versos… sÃ, es cierto, a partir más o menos de la mitad (en agua dulce dejé dos lirios) se emparejan y empiezan a sonar prolijos, antes sobra o falta alguna palabra. Pero más allá de eso, es una poesÃa de un erotismo fresco, romántico, y los dos últimos versos… ¡me mataron!
Coincido con Norisabel y Graciela; a medida que se lee el poema gana en música y en sensualidad, tal como sucede al amar. De manera que si lo que querÃas decir es lo que el poema va diciendo, inconteniblemente, a mà también me mataron…!
Adhiero Horacio Gigli y otras. BellÃsmo!!! Quién dijo que la rima es perfecta cuando se hace con la calculadora al lado (y yo escribÃa contando con los dedos). De todos modos creo que la primer crÃtica es en pro de la excelencia a alguien que está por alcanzarla. Adelante!!!
Sugerente, provocativo, atrevido, pero sin sobrepasarse.
Pues discrepo de Ana Cardo y Bobdylan, cosa que ultimamente se está convirtiendo en costumbre. Porque ya he comentado en alguna otra ocasión que entiendo que hay caminos intermedios entre la poesÃa reglada y la puramente libre. Que esos caminos no tienen porque desmerecer siempre que el mensaje mueva y emocione, que haya ritmo y sonoridad, que haya en definitiva poesÃa. Es decir, me importa un bledo la forma si consigo el resultado. Y tu poema es un derroche de sensaciones, sabores, olores, colores…una merienda inacabable y sensual. Puedo criticarte, quizás un cierto abuso de las comparaciones: como…, como… o de los porque…porque…, pero vamos, es por ponerme algo quisquilloso.
He disfrutado de tu banquete y brindo con ese vino dulce de muslos.
Te voto con un cuatro.
Soy Juan BallarÃn y mi poema es el nº 105. Te estarÃa muy agradecido su pasaras a leerlo y dejaras allà tu opinión aunque sea crÃtica (no importa que la crÃtica sea dura si encuentras que no te gusta el poema, pues es la mejor manera de aprender y mejorar, lo que si ruego es que sea una crÃtica razonada).
Un saludo cordial y suerte en el concurso.
Las imágenes de tu poema son tan intensas y cargadas de erotismo que la métrica y la rima pierden importancia, porque la poesÃa moderna es asà de fresca. Tal vez si lo expresado en él hubiera sido escrito en decasÃlabos, endecasÃlabos, etc. habrÃa perdido espontaneidad.Me pareció un poema encantador y sorpresivo. Te felicito !!!
Coincido con la crÃtica de Corin, aquà lo que importa es la frescura con que el poema se desliza mientras se va leyendo.
Suerte.
Una lectura fácil y a buen ritmo, con imágenes crecientes en virtud y derroche de elementos frescos en cada verso. No hay más. Me ha entretenido mucho tu poema y he disfrutado lo suficiente como para votarte con un 4. Suerte en el certamen.
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En el numero 33 tienes un Club abierto, por si quisieras unirte. Maestrofabula.
Saludos.