Asesino de poquito. Por Catalina Ortega

Asesino de poquito
En su última hora en el corredor de la muerte, Willy El Tejano recibía la absolución de manos del capellán de la cárcel y Leer Más →
En su última hora en el corredor de la muerte, Willy El Tejano recibía la absolución de manos del capellán de la cárcel y Leer Más →
Uno de mis hijos adosados, Fabio, el napolitano, sembró una tahúlla con hermosas plantas, entre las tomateras de la Huerta. Quedé deslumbrada ante la belleza de aquellas exóticas hojas verdes, que desprendían un aroma Leer Más →
1.ª Cinco puntos de sutura; cura de quemadura química; desinfección de mordeduras humanas y múltiples arañazos. Se administran analgésicos y ansiolíticos por vía intramuscular- Esto podía leerse en el apartado «Tratamiento» del Leer Más →
Te lo dije; te dije que te abrigases. Hacía mucho frío aquella maldita mañana de domingo, 18 de diciembre. Fue el frío del invierno el que te encogió el corazón como un avariento puño Leer Más →
Berenguer era aparentemente «normalito», incluso salía semidesnudo, tapando su rostro con antifaz ornado de plumas rosas, agitando banderas de colorines en una carroza el día del «Orgullo» Sin embargo, una gran lucha libraba Leer Más →
Aquella negra madrugada sentí llegar el fin del mundo. El viento silbaba, rugía, bramaba, aporreaba las contraventanas. Sombras fantasmales me asediaban. Enloquecí hasta el punto de confundir el ulular del aire, filtrándose furioso por las rendijas, Leer Más →
Amaneció una mañana de completo lunes, aunque el calendario mostraba ser domingo. Al ser día laborable disfrazado de festivo, las nubes Leer Más →
Un malecón donde no rompen olas ni amarran barcos ni huele a salitre mezclado con el aroma de las algas Leer Más →