El antepenúltimo viaje de mi corazón a Islandia.

BoTTiCeLLi · Mensaje por **BoTTiCeLLi** » 25 Oct 2006 07:25

Te dije tantas cosas. Te hice tanto. Cosas buenas y cosas malas, pero todo eso pasó. Ahora he venido con un objetivo directo. He venido por ti y a por ti.
 Me voy y no quiero irme sólo. Quiero que vengas conmigo al país del vapor. Allí donde la noche es más clara que en ningún otro lugar. Allí donde las carreteras aún están por asfaltar.
 He comprado una casita pequeña junto al mar. Tendremos un perro, y en verano, saldremos a pasear con él. En invierno nos quedaremos en casa, acurrucaditos, junto al fuego, y sin amarnos, nos contaremos nuestras mentiras.
 
 Y cómo viviremos, me dirás tú.
 Y sabiendo de antemano que harás esa pregunta, te respondo que no necesitaremos dinero para vivir, pues allí se puede vivir sin lujos, sin pagar nada. Ya no tendrás que trabajar para nadie. Tan sólo vivir cómodamente mientras pasa el tiempo de forma lenta, que al fin y al cabo es lo que hace la humanidad de forma rápida.
 
 Vente conmigo amor mío. Dame un sí por primera vez en tu vida. Envejezcamos y muramos juntos, y juntos, olvidemos el pasado.
 Vente conmigo amor mío, y permite que este eterno amante tuyo, te diga que te ama cada mañana.
 Quiero hacerte tantas preguntas. Quiero…decirte algo más de lo que te dije. Quiero que sea verdad todo lo que sueño.
 
 Pero no. No voy a hacer nada. Ni siquiera voy a pasar a despedirme. Seguiré mi camino recto y no tomaré el desvío que lleva hasta ti. Me iré sólo. Allí donde hay días que duran medio año y noches que duran el otro medio. Viviré sólo, amándote desde la distancia. Mirando al mar y hacia el sur, soñando con lo que no pudo ser y jamás dejó de ser un sueño, un sueño solitario, anidado en mi viajero corazón.

KURICO · Mensaje por **KURICO** » 25 Oct 2006 18:21

NATURALEZA MUERTA
 
 Para vaciar mis sueños de ti
 Volqué los lienzos de mis paisajes y naturalezas muertas
 Sacudiendo con fuerza desde mi ventana oscura
 En un amanecer cualquiera.
 Asidas con fuerza a los bordes,
 Las imágenes de ti me trepaban de nuevo hacia los dedos
 Y, en incandescente viaje, me encendían.
 No puedo apagarte, no puedo,
 Y en agotado vuelo raso te amo de nuevo,
 Una y otra vez,
 (como si amarte fuera cosa de un momento)
 con la constante (infinita) fuerza amante
 que recae sobre lo que no existe.