Veo y me fijo en las caras de todos
los que han vivido y vivirán un día.
Desde Adán hasta el fin de los tiempos…
– Ibn Arabi –
Buenos Aires, una esquina olvidada y sucia. De fondo las vidrieras rotas de un local en alquiler, los agujeros cubiertos por pedazos de madera y cartón, y los rombos de una cortina metálica oxidada. Era un día mundial, de partido, gris y lluvioso, donde todos estaban en otra cosa. Yo venía abandonado en mis pensamientos cuando lo vi. Casi tropiezo con él y su mundo. Un bulto, echado de costado sobre un colchón, sucio de intemperie y viejo de angustias del que asomaba una cabeza, estoica, apoyada sobre la palma de una mano. Leer más