74- Un día normal. Por Scorpio
- 29 junio, 2011 -
- Relatos -
- Tags :
- 40 Comentarios
ÉL
Cuatro de la mañana, hora señalada en el despertador para laborales y festivos. Mi mano busca el celular, con el reflejo aprendido y remojado tras años de experiencia. Se apaga y da inicio a uno o dos minutos de impulso para bajar de la cama y despojar por unas horas al sueño de su trono.
El camino al cuarto de estudio lo transito casi como autómata en la oscuridad, a menos que se cambien los muebles de lugar, lo que me supone al menos ocho días de moretones pasajeros.
Enciendo la luz y como en el génesis, la oscuridad se aparta, ocultándose ahora bajo los objetos, como medio día artificial. El computador espera el ritual de todos los días, mientras el sofá se presenta ante mis ojos, sobrio y convencido de su papel de mediador entre mi voluntad y el libro que traigo conmigo.
Mensajes idiotas, uno que otro correo interesante, titulares de periódico y la música que acompañará mi lectura es el orden del día de esta mañana sin fin.
Hora de entrar al cuarto. Un poco antes de las seis de la mañana la imagen de una mujer hermosa y casi desnuda sobre una cama testigo de muchas noches, guardiana de secretos y humedades; me detiene como tantas veces a contemplar lo afortunado que me debo sentir, aunque la verdad no sea así.
Un beso en la mejilla, una suave caricia sobre esa voluptuosidad conocida y sensual, una mirada agradecida y una ducha fría.
Te levantas fingiendo que te acabas de despertar, aunque yo se yo se que llevas rato esperando que entre en el baño para evitar una conversación innecesaria.
El baño y la ducha con agua fría no toman más tiempo del necesario, sumado a unos minutos de cavilación inevitables.
Mientras me visto, me preparas el desayuno; no tengo que perder tiempo escogiendo, pues la ropa está dispuesta sobre la cama, impecable “como corresponde”, según tus palabras guardadas en mi mente.
La tensión del desayuno transcurre con el mejor esfuerzo por parte de los dos por disimularla. Preguntas obvias, respuestas calculadas, sonrisas amables, una mano tomada y un “gracias” al final del acto.
Siento tu mirada en mi espalda mientras me coloco el abrigo y tomo las llaves del carro. Sólo ahora adivino unas lágrimas que imploran salir de tus ojos. Tu mano toma la mía, siento tu leve temblor y con una mirada cortante y una voz que quiere ser indiferente, te digo: ¡ADIOS!
ELLA
A las cuatro de la mañana suena tu celular sin importar que tengas o no que trabajar, total, parece que vivieras solo, no tengo derecho a dormir un poco más así no tenga ninguna razón para madrugar; tal vez por eso el minuto que tomas para levantarte al fin, se me hace interminable.
Por fin sales del cuarto dando pasos de borracho, tropezando aunque las cosas nunca cambien de lugar. Ahora que estoy despierta no me queda más remedio que recordar. Parecías ser otra cosa, hace unos años prometías ser un hombre de éxito, un triunfador: no resultó así. Tu jefe es diferente.
A las cinco de la mañana me levanto y te miro, como tantas veces. Un cuadro que podría ser interesante –un hombre con un libro en sus manos, un computador encendido- , da una imagen diferente desde mi orilla: un hombre entrando en años, sosteniendo un libro sobre su pecho, frente a un computador mostrando una página de porno; un desperdicio de talento, mi esposo.
Vuelvo a mi habitación y me acuesto nuevamente, para que observes lo que ya no tendrás, lo que ahora pertenece a un verdadero hombre.
Siento tu mirada recorriéndome en silencio, me miras en una rutina que apenas logro comprender. Hoy me acariciaste como lo haces de vez en cuando y un beso en la mejilla me desconcertó. Ya no hay marcha atrás.
Por fin entras a bañarte dándome el tiempo necesario para prepararte un desayuno ligero, y para acomodarte una ropa que por lo menos de la imagen de lo que deberías ser.
Llega el momento de encontrarnos frente a frente. Al tiempo que comes, hablamos de cosas sin importancia, de trivialidades; tomas mi mano y me agradeces. En el fondo siento un poco de cariño por ti, pero también siento pena.
Das la vuelta para colocarte tu abrigo y tomar las llaves del auto. En ese momento las lágrimas corren a mis ojos, siento una gran tristeza de que te hayas enterado y quieras seguir conmigo. Al fin me dices “adiós”, y yo puedo llorar.
Una estructura arriesgada para un relato atípico con fondo de entierro sentimental.
Suerte.
¿El amante es el jefe? Qué perra codiciosa.
Éste es uno de los que más me ha gustado. La construcción de dos personajes inmersos en la cotidianidad y una historia subyacente: existe el triangulo, sí, pero el amante no es tan importante, sólo es una causa más del conformismo y la desilusión.
Repaso de redacción, algunas líneas, sobre todo en el capítulo dedicado a él, podrían ser mucho mejores.
Hace mucho tiempo que nadie me había sacado una carcajada tan sonora como la que acabo de soltar con tu comentario… ¿El amante es el jefe? Qué perra codiciosa. Buenísimo.
!Lo cotidiano acaba por ahogarnos! TE felicito por el relato, sencillo y muy descriptivo.
BUEN RELATO, UNA PAREJA QUE INCLUSO PUEDE SOBREVIVIR EN EL MÁS ABSOLUTO CONFORMISMO. ÉL, BIEN ATENDIDO, CON SU ROPA LIMPIA Y EN ORDEN, CON UNA ESPOSA CON COMPLEJO DE CULPA. ELLA CON UN AMANTE QUE A LO MEJOR TIENE OTRO COMPROMISO (CASADO, POR EJEMPLO) PERO QUE LA SATISFACE Y UN MARIDO QUE LE DA CIERTO ESTATUS. ASÍ LOS DOS SERÍAN UN PAR DE CÍNICOS. BUEN RELATO
Siempre han dado muy buen resultado las dicotomías, tanto en la literatura como en el cine. En esta ocasión encuentro mucho más conseguida la parte de «ella», más sutil y profunda, lo que me induce a suponer que el autor es autora (aunque ¿quién sabe?). Indudablemente la realidad individual suele ser muy diferente.
Pues eso, que me ha gustado bastante.
Un saludo con mis mejores deseos para el certamen.
Está lograda la descripción del espacio,ese despertar al día con actitudes enfrentadas, como en un espejo. No me creo que «ella» llore y que a «él» le importe. Los personajes están contemplados como a través de un microscopio y no transmiten la intensidad que el relato merecería.
En cualquier caso que haya suerte.
Muchísimas gracias a todos por sus comentarios; a Charlotte Corday, siento decirle que soy un «él», y por esto mismo su comentario se ha convertido en un hermoso cumplido. Aprecio en gran medida sus aportes, el tiempo y las palabras dedicadas a un texto que con su concurso late pleno de vida. Un abrazo.
Scorpio:
No lo digo porque lo acabas de confesar, pero desde el inicio de la lectura me percaté o sentí, que eras él; ¿será porque yo soy escorpión?… No lo sé. Quizá la dualidad, característica principal del escorpión, es la me hace decirte y felicitarte por lo excelente de tu relato. Una dualidad confrontada ante la aplastante monotonía. Un aplauso para ti, hasta donde quiera que te encuentres.
Mil gracias por el aplauso y el comentario, Aval; los recibo con mucho cariño. Un abrazo para ti.
Buen relato narrado bajo dos puntos de vista, a veces diferentes, a veces coincidentes. Suerte.
Ya no se arreglaría nada hablando, poniendo sobre la mesa, junto con el café, los pensamientos de cada cual. Ella ha elegido a alguien que le parece más hombre, aunque a juzgar por su preocupación por el traje, debe ser «más hombre», solo en lo exterior.
Y él la sigue queriendo…
Muy buen relato.
Gracias por la visita, Lola y Leonard. Un abrazo y mis mejores deseos para el certamen.
Un relato estupendo. Triste y bien escrito. Me ha gustado mucho.
Dice el refrán que lo bueno, si breve, dos veces bueno. En mi opinión, lo que se presenta como diferente en un certamen, si es interesante, rompe con la monotonía. enhorabuena por el relato y suerte.
Enhorabuena por tu relato, me gusta el recurso de aportar los distintos puntos de vista de los dos protagonistas, y me gusta la brevedad, como has conseguido con pocas palabras dibujar toda una historia de convivencia e infelicidad. Suerte.
Muy original y entretenido, me ha gustado a pesar de algunos errores de redacción facilmente subsanables. Al terminar de leerlo reflexiono y concluyo que es curioso que sea original algo tan habitual como esa historia. Pero así es.
Suerte Scorpio
Estrella, JB Fletcher, Lucille Angellier y Noski, muchísimas gracias por su visita y los comentarios; con sus palabras y la de los otros que lo han hecho con anterioridad, puedo decir que ha valido la pena el participar en el certamen. Un saludo lleno de calor para todos ustedes.
Me ha gustado, pero sobre todo la estructura del doble punto de vista de una tristísima relación.
Difiero de Charlotte Corday en cuanto a que ve más conseguida y profunda la parte de ella, a mí me parecen sentimientos más profundos los de él.
Supongo que te divertirán estas opiniones que solo tú sabes de qué van.
Suerte
Genial! Me ha encantado!
Suerte.
Un relato contado de una forma diferente! la misma historia contada dos veces y que te hace sentir cosas distintas en cada una. Un gran acierto! Enhorabuena.
… lo de la frase de «un verdadero hombre» en boca de ella, refiriéndose a alguien que por los datos del texto es un hombre de éxito en su trabajo… umm.. pues ¡no me ha gustado!, parece un estereotipo de lo que los hombres piensan que piensan las mujeres…
Suerte en el certamen!
Es sorprendente como una misma situación puede verse desde dos puntos de vista tan distintos que parece tratarse de situaciones totalmente diferentes. Muy bien desarrollado en tu relato, Scorpio.
Suerte para el concurso
Muchas gracias por la visita y por los comentarios a Lupe, Jara Maga, Ambrose Bierce, y Cath-22, y bueno Catch, eso lo dijo «ella», no yo…
Un abrazo y de nuevo ¡muchas gracias!
El enfoque narrativo múltiple o la perspectiva múltiple de tu relato es un valor añadido a una historia que fluye sola, sin desgarros ni estridencias a pesar del tema tratado. Sin dramas: cada cual aporta su mirada a lo que es un día normal, y seguirá siendo un día normal por mucho tiempo, aunque tengan vidas paralelas, que también acabarán siendo tan cotidianas como su propia rutina. O ese es, al menos, el regusto que saco de la lectura de tu texto… como la vida misma, algunas veces tan difícil de expresar y que tú lo has hecho con maestría. Me encantó. Muchos se sentirán identificados.
Mucha suerte y saludos.
Interesante relato, bien narrado y bien constuidos unos personajes totalmente creibles, enhorabuena.
Ellos ya no necesitan hablarse. ¿Para qué? el sueño fingido y el desayuno en silencio lo dicen todo. Has contado una historia dramáticamente cotidiana. Aunque en cosas más menudas, la costumbre hace de todos nosotros unos fingidores. Me gusta. No sé si hay alguna expresión mejorable o no, pero lo que si que hay es un buen relato.
Te agradezco que hayas leído mi relato y el comentario.
Curiosos relato, interesante estructura, suerte en el certamen, Scorpio.
Dimanche, E.Mendoza, Kellroy, muchas gracias por la visita y los comentarios, son de gran valor para mi (enriquecedores). Un saludo con todo mi afecto y muchos éxitos en el certamen.
Reitero mis agradecimientos.
No puedo hablar de formas o estructuras. Si dicotomias o su exito en literatura. Simplemente puedo decir que el texto me atrapo en el gusto, en el asombro y en el disfrute. remite a ese mundo que construimos hombres y mujeres en el hilar de los dias donde los silencios estan llenos de contenido. Sería salir del paso desearle suerte, para algo que de ella no depende, para algo que ya existe y que sólo me gustaría que se continuara desarrollando, claro no aquí, porque aqui es breve.
un abrazo
Un relato exquisito. De estructura definida y diferente a la vez de ver la misma situaciòn desde dos òpticas diferentes. Felicitaciones Scorpio. PAtricia
El: La tensión del desayuno transcurre con el mejor esfuerzo por parte de los dos por disimularla… Ella: En el fondo siento un poco de cariño por ti…el y ella, a pesar de saber que acabó, muestran la intención de no querer dañar más al otro, que buen relato, refleja el dolor del desamor por alguien a quien se amo profundamente…
Interesante conocer los dos puntos de vista en el relato. Me encanto la historia.
Felicitaciones scorpio,
A Carlos, Patricia, Flor de la Canela y Leidy, muchísimas gracias por la visita y los comentarios (halagadores). Dan mucho ánimo para seguir adelante. Un abrazo a todos y todas.
muy buen relato… es muy interesante la idea de describir un momento desde dos perspectivas diferentes, es entretenido y a medida que se avanza en la lectura crea una atmosfera de espectativa acerca de lo que ocurrira en el siguiente parrafo…
nunca quisiera estar en el lugar de «EL».
felicitaciones.
Muy Buen relato. Maneja bien los tiempos y los dos enfoques. Felicitaciones al autor y éxitos en el certamen. Un abrazo
A Ti Noel (que pena la demora), a Campeador y a Troyano Rheus, muchas gracias por los comentarios y la visita. Un fuerte abrazo.
Al releer, intento comentar algo más.
Definitivamente, pienso que es una pareja rota, y me ratifico en que en él hay sentimientos más de ellos dos nada más, mientras que ella, sean cuales sean las razones que la han llevado a ello, en realidad, está pensando en sí misma y en «su» hombre.
Este aspecto me gusta menos porque creo que es un añadido, en realidad aquí lo que importa es la nula comunicación entre ambos, al meterle lo de la infidelidad, ya hay un motivo externo para esquivarse, pero tal y como empieza el planteamiento, ni lo necesita, creo yo, se podía haber quedado en ellos dos.
Gracias por tus comentarios y suerte.
Le he comentado a otros participantes que estoy haciendo una especie de votación particular, después de haber tomado unas notillas sobre cada relato, y eligiendo unos cuantos que por una u otra causa más me han gustado.
Uno de ellos es el tuyo, me gusta mucho, y es curioso, porque no lo veo original, pero la forma en la que está escrito, me llega mucho, tanto que me da rabia que para mí, se estropee tanto con la existencia de una tercera persona.
Porque lo que me parece genial es la forma de saber reflejar esa incomunicación entre la pareja.
Y ahora que lo releo, ya se sabe que ante cualquier hecho o situación, dos personas que los vivan, lo hacen de forma diferente, pero me llama la atención mucho lo que dice él repecto a su rutina con el ordenador donde mira algún mensaje idiota, algún correo interesante, titulares de periódico, música… y ella dice que lo ve él con el oredenador es alguna página porno. Eso no concuerda, porque no se trata de que se lo estén contando a alguien y entonces para justificarse cada uno mientan, sino que en este caso se lo están diciendo a sí mismos, entonces no lo entiendo, o te has líado o no sé qué falla.
Por todo ello, me gusta el relato, pero es como si hubiera sido mío y yo dijera, ¿por qué no habré puesto esto o lo otro?, ¡qué rabia!, en definitiva todo eso me lo desluce y creo que sería necesario arreglarlo.
Pero ahora pido perdón por atreverme a sugerirlo siquiera, pero ya sabes el porqué.
Suerte
Bueno Lupe, lo primero que quiero decirte es un inmenso GRACIAS, por haberte metido en la piel del relato; por lo demás, no le des muchas vueltas; tal vez ÉL si se cree lo que piensa de la Internet, y a lo mejor luego de ojear lo descrito, se da licencia para ver otras cosas… Tal vez ÉL mismo intenta engañarse, tal vez…
…y tal vez, si no hubiera una tercera persona, algún lector estaría preguntándose «¿y por qué no se hablan?».
Reitero mi agradecimiento y, bueno, siendo como son las cosas, te envío un abrazo virtual (y muy fuerte).
Como ya sí parece que se acaba todo (independiente de que se quede en la web e incluso quizás podamos seguir hablándonos), quiero:
Por un lado expresar mi experiencia:
Es la primera vez que escribo algo para darlo a leer a los demás, bueno, no es del todo cierto, al mismo tiempo lo hice con otro relato corto, pero no tiene nada que ver con el seguimiento de este. Y la experiencia ha sido preciosa. ¿Qué iba yo a imginarme que habría tantas personas comunicándose alrededor de este concurso?, ¿cómo iba a pensar que unos días con más tiempo y otros con menos, esto me iba a llenar tanto?, (tanto que estaba deseando acercarme al pc para ver qué había de nuevo).
Y por otro lado expresar mi agradecimiento y felicitación tanto a la administración, que creo que trabaja con muchísimo interés para sacar esto adelante, como al resto de (¡prepárense!), «escritores y escritoras».
Cuando pueda iré tomando nota de sugerencias hechas en varios campos, tanto en recomendaciones estilísticas como en lecturas, (me permito hacerlo yo con los dos libros a los que aludo en mi relato).
Creo que a unos once relatos les he hecho una consideración especial, para decirles que eran los que por uno u otro motivo más me habían gustado. Digamos que en una libreta puse una frase a todos y una calificación. Esos alcanzaron hasta un ocho, pero hay después un número largo con un siete, de relatos que me han gustado, pero casi en todos, me lo ha estropeado la falta de originalidad en temas creo que demasiado socorridos e impactantes. Si volviera a leerlos, seguro que variaría mi opinión cualitativa y cuantitativamente, pero eso ya queda para otros momentos.
De nuevo, gracias a todos y suerte.