Te veo, muerte,
en los ojos de tus ojos
posados en cualquier rostro.
Te siento, muerte,
pues soy hija de tu esquela;
ribete de negra ausencia
cuando me reconozco en tu sombra,
cuando el lazo de tu soga roza mi percepción
y sólo a mí rescatas en beneficio de otros ojos.
¿Hasta cuándo, muerte?
Hasta que sacies tu sed a través de mi crisol
y seco ya, sin lágrimas, llegues
para seguir bebiendo en los ojos de otros ojos.
Ay, la muerte, esa mala zorra caprichosa. Un buen poema, enhorabuena.
PD: Fallé en el voto, quise poner 4 estrellas 🙁
Hay una sugerencia de Luz Fugaz para dar respuesta a las votaciones masivas que se están produciendo en algunos poemas, de amigos y demás y que no se basan en la calidad del poema. La idea es que entre todos los que aquí hemos insertado poemas nos leamos, nos votemos y nos comentemos. Quizas de esta manera podamos contrarestar semejante atropello al buen gusto y a la calidad poética.
Después pasaré a comentarte y a votarte.
Mi poema es el 195 GUERRA, y recibiría cualquier crítica (en el sentido que sea) con agradecimiento.
Un saludo
No está mal el poema, pero rebosa desesperanza y se vuelve algo siniestro. Confío en que tu estado de ánimo haya mejorado después. A veces parece que más que esperarla (la muerte) le suplicas que llegue pronto…
En fin, espero que no.
Te voto con un 3 y te deseo suerte en el concurso.