163- Palabras sin nadie. Por Leandro Camín
Sólo nombrar. Que el signo no se llenara de memoria.
Sólo nombrar. Que el signo no se llenara de memoria.
Versan los cielos tu nombre, Tu nombre que siempre suspiro,
Tu boca, como una grieta abierta me devoro de golpe,
I. Yo no creo que la música descuelgue la nocturnidad. Por eso hablo en claves. A la noche la trato de fa. Y es en la muerte donde más se vive y en tu canto donde nada se oye.
Separado de la orilla atmósfera tan a tu aliento
Poema descalificado para el premio del público. Ayer te abracé, mi niña, sobre el suelo duro y frío.
Nos reprochan haber sido felices en las horas amargas de la noche
Noviembre danza sobre glaciales y el verde del campo
OH! CLEMENCIA ABSURDA DEJAS ENSORDECIDA A LA MAGIA DE UN GRITO
El encantador de serpientes con su sonrisa a medias. Uno se acostumbra a todo…
Cada día, al despertar he de olvidarme de lo frágil que soy
Hoy regresarás a las nueve menos cuarto del piso veinticinco de Torre Picasso,
Este desierto, mi voz, bajo tierra, mi sonrisa,
Urgencia de correr el tiempo: segundos inflamados en la boca
Y me revelo a ser un trotabarrios queriendo discernir el agua