Esta noche,
pisaré con mis tacones
de aguja los alacranes negros
de tus celos, y beberemos
el veneno derramado.
Esta noche,
encerraremos las lágrimas
en cofres de cristal acorazado.
Y volaremos bajo, casi a ras
del suelo, sin dañarnos.
Esta noche,
Vestiremos de limpio
Las sábanas de la memoria
Y sellaremos con cal
Los desencuentros.
Esta noche
sobrarán palabras, faltarán versos
para contar lo que haremos
al abrigo de los vientos
que nacen en mi cintura.
Esta noche
olvidarás mi nombre,
me llamarás Hebe, la diosa,
como en tus sueños alocados
de juventud tardía.
Esta noche
bajarán las estrellas a mi cama
envidiosas de tus besos,
esas damas alocadas
bailarán boleros en tu honor.
Esta noche…