más allá de esta calle hay otro miedo
otra acera y otro juego donde caminar por siempre de puntitas
y entre todas estas cosas habita siempre un hombre viejo
y su piel que ahora escurre
y su imagen ya sitiada por botellas de colores
como pájaros perversos
aferrada a aquella mesa
lo cierto es que la vuelta al patio antiguo
de exquisitos cuerpos sin aroma
la sórdida costumbre de lamernos el hastío
resulta mil y una veces mejor partido…
que el panteón de la peor de las tristezas
Zenón, busqué a Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, supongo que no los habías invitado. Bien.
El Ingeniero
Un poema del que me gusta casi todo: su brevedad, sus imágenes, su ritmo, el verso con el que comienza y el que cierra el poema, la falta de puntuación y de mayúsculas que ofrece mucha libertad al lector. El «casi» sería el encuentro con los puntos suspensivos después de evitar la puntuación, son innecesarios para el efecto que buscas lo consigue naturalmente el poema sin ellos. Un saludo y suerte.
Poema con reflejos de vivencias, muestra la realidad. Suerte en el concurso.
Me encanta este poema. Es oscuro, mordaz, con mucho vuelo poético. Mucha suerte en el certamen.
Estos últimos versos tienen su mérito:
«la sórdida costumbre de lamernos el hastío
resulta mil y una veces mejor partido…
que el panteón de la peor de las tristezas»