Mi cigarillo amado humea, arde.
Por el soplo de vida va la muerte.
El hombre por su suerte muere tarde
y en sus labios queda una canción inerte.
Maravilla de luz aquesta suerte
de vivir, vivir, vivir y de dolerse:
mi cigarrillo amado es tan cobarde
que humea a gritos por ahogar su suerte
de haber quemado ahora y no más tarde;
y en fin que era ese su destino.
Y yo de gritos quisiera dar quinientos
y muchos más, pero me callo
todo el dolor de golpe en mi cabeza y tanto,
que mi inerte canción me huele a muerte
y un verso entre mis dedos arde.
Original y fresco poema. Suerte en el concurso
La enhorabuena por la idea y lo atrevido de tu expresión. Tal vez pudiste perfeccionarlo haciendo que todos los versos fueran endecasílabos y cuidando un poco las rimas, pero tu fuerza es tal…
Muy bien. Suerte y acepto lo de amigo.