¿Por qué callan tus labios hoy?
¿Por qué miras a la pared en busca de Dios?
¿Por qué retienes esas lágrimas de ira?
¿Por qué otorgas? ¡¿Por qué?!
Puñales, palabras, da igual.
En tus brazos sostienes a la calma,
La herida calma que tratas de curar.
¿Desde cuándo? ¿Hasta cuándo?
Presa del valor, presa del miedo.
Sangras, lloras, ríes y callas.
¿Qué es lo que el silencio cubre?
¿Callas culpas? ¿Callas ayeres?
¿O acaso callas tus heridas de paz?