Estos días creo que han conseguido
que de una vez se apagara el fuego.
Hay ciertas casas, como esta,
en las que el que manda no es el dueño.
Pueden ser desgraciadas las eternas discrepancias
y lo es también el amor cuando está pleno.
No siento dolorosa la pasión de aquellas noches
aunque sólo vivan en mí como un recuerdo.
Los relámpagos, los soles, nuestras lluvias
eran luchas que alimentaban nuestros cuerpos.
Todavía aún me anima
el sabor tan dulce de tus besos.
Aunque tu figura me resulta irresistible
creo que otra persona es la que ocupa ya mis sueños.
Eras en mi cuerpo sensación maravillosa
y sacudías mi alma como un trueno.
Le has dado a mi vida su sentido
aunque de ella te marcharas con el viento.
Bequelar El Bogotano, la autocrítica es el primer gran paso en este camino, aunque el poema está bien.
El Ingeniero
Bequelar, estoy de acuerdo con tu autocrítica, y que seas tú mismo el que la hace, me parece una actitud envidiable para mejorar. Un saludo y suerte.
Poema con buen ritmo, me ha gustado, expresa mucho sentimiento, con sencillez.
Suerte.
Sutil. Bien llevado. Aunque asumo, no me comunica demasiado. Mucha suerte en el certamen.
Aconcagua, gracias por el comentario pero me parece un texto un tanto flojo, los «poemas» que escribo suelen ser menos líricos y sin rima y al enviar este (porque pensé que el rollo era más así) me arrepentí de no haber mandado uno mejor, pero bueno. En todo caso incluso tengo un par de cosas que mejoraría en él. También debo decirte que creo que has captado la clave en tu comentario. Por cierto, he buscado tu poema y no lo he encontrado. Un saludo.
Parece que el amor pasado era(¿aún es?) más poderoso que el presente.
Un texto delicado,sutil, que comunica las confusiones del amor.