95- Alma mía. Por Inés de Suárez
Alma mía, libérame De esta cárcel de silencios Rescátame como a un náufrago De los designios de Zeus Comparte con tus amigos
Alma mía, libérame De esta cárcel de silencios Rescátame como a un náufrago De los designios de Zeus Comparte con tus amigos
Caracol de redondas concavidades Sonoro oleaje de mares imaginarios Tiempo endurecido, ambarino Comparte con tus amigos
Se puede o debe tener todo y, en absoluto, se puede o debe tener demasiado. Una mujer que llora en lo oscuro es una vocación. Comparte con tus amigos
“Soy palabra entre tus manos Y olvido en tu memoria Pero existo tan tangible Como la tristeza ausencia de tus ojos” GGR Despertó una noche con su sombra enredada en la telaraña Sus pies intentaron dar con el hilo de voz bajo sus plantas artificiales Comparte con tus amigos
Mientras vivan del recuerdo de una guerra entre hermanos. Mientras los jefes del pueblo sean miserables gusanos. Comparte con tus amigos
Bajo el cielo gris de Abril, escala imperfecta de tonalidades infinitas, descansan dos almas al amparo del calor que abriga su destino, perdidas en el inmensidad del mar que nubla nuestros sentidos. Comparte con tus amigos
Vengo de la sangre derramada y de un peñón de hombres que alcanzó a la historia con centauros. Vengo sin vengar, con mi lengua limpia y un corazón de trige desgarrado Comparte con tus amigos
Estos días creo que han conseguido que de una vez se apagara el fuego. Hay ciertas casas, como esta, en las que el que manda no es el dueño. Comparte con tus amigos
Había tantas flores cortadas encima de la mesa había tantas patas de cordero Comparte con tus amigos
Ímprobas, clásicas, céntricas, límpidas cunas, cánticos sáficos, trémulos, válidas tunas. Céfiro y gélida brisa, ubérrimas siéntense, pájaro ovíparo, en éxtasis rítmico, tiéntase. Comparte con tus amigos