No intentes ir por la vida lloriqueando. Por Puri Teruel Robledillo

No intentes ir por la vida lloriqueando

 

No intentes ir por la vida lloriqueando.
No impregnes a nadie con tu tristeza.
Quédate quieta frente al espejo y
con papel de estraza
líjate la pena,
no tiene que quedar ni una brizna siquiera.
Respira hondo.

Deshazte de lo superficial.
Vístete con una pizca de ternura,
y ponte encima algo que tape
ese dolor que emana de tu pecho.
Guarda en el bolso algo de bondad,
la suficiente para repartir a algún transeúnte
que te encuentres por la calle.

Contribuye con tu sonrisa
a descontaminar el mundo.
Reparte panfletos de esperanza.
Sé una buena ciudadana.

 

No intentes ir por la vida lloriqueando.

Puri Teruel Robledillo

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *