NOCHE EN LA TIERRA (Internet, cámaras web)

[Tinto_de_toro]

NOCHE EN LA TIERRA. (Internet, cámaras web)
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<BR>Alguien dio a algún resorte
<BR>y nos puso en un puño
<BR>la noche de la tierra.
<BR>¿A través de qué éter,
<BR>emanación o vértigo,
<BR>traídas por el hechizo de las cuatro
<BR>esquinas del planeta,
<BR>llegaban hasta mí las hijas solas
<BR>de la pantalla helada
<BR>para pedirme vez,
<BR>fiebre y mentiras?
<BR>
<BR>Como un chorro de helio,
<BR>como un disparo líquido estallaban
<BR>sus pequeñas ventanas sobre el ávido
<BR>resplandor de la mía.
<BR>Llegaban desde el fondo
<BR>de su duro confín,
<BR>con sus nombres de lujo, siempre anónimas.
<BR>Venían a lo suyo,
<BR>queriendo compartir el fardo grave,
<BR>con su interés a cuestas.
<BR>Yo el mío mendigaba: ese dedal
<BR>de lúbrica justicia.
<BR>
<BR>Vueltas ártica brisa, tibia arena,
<BR>disueltas en fotones y sopladas
<BR>por el émbolo ciego de la red,
<BR>llegaban y se iban:
<BR>un engaño del ojo, las apenas.
<BR>
<BR>Desde lejos venían, barajadas
<BR>por la noche oceánica,
<BR>para juntarse en haz y llamar a mi puerta:
<BR>las casadas
<BR>de precavido orgasmo. cicateras;
<BR>las flacas, peligrosas
<BR>de fémur y de alma;
<BR>las viejas
<BR>y las gordas
<BR>calientes como heridas;
<BR>y las otras
<BR>las nuestras,
<BR>las que nadie
<BR>lo dijera.
<BR>
<BR>Venían a buscarme el agua sucia,
<BR>venían a volcar sus orinales.
<BR>Me dijeron pecados, que bebía.
<BR>Purgábamos
<BR>quién sabe qué terror o qué pureza.
<BR>
<BR>Ninguno conseguíamos dormir;
<BR>y porque daba pena
<BR>vernos todos así tan desveledaos
<BR>cuanto escuchar quisieron les hablé,
<BR>del mal que moriría, yo lo supe por ellas.
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<BR>Y una flor de piedad nos quemaba en la boca.
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<BR>Vicente Gallego. De su nuevo libro: "Cantar de ciego"
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