¿Por qué la brisa es suave y placentera?,
el mar tiene un arrullo evocador,
los trinos de los pájaros son loor
y se abren las corolas con la aurora?
¿Por qué la música es más sincera,
el verso viene envuelto en resplandor,
los cuadros tienen hoy otro fulgor
y la sonrisa es tan hechicera?
Porque, tras el Invierno quejumbroso,
de frío viento y nieve en la cumbre
llega, por fin, la ansiada Primavera.
Su largo aliento – beso primoroso –
es portador de nueva dulcedumbre:
Natura estalla en eclosión primera.