Fueron huesos firmes
enredados a la carne
Fueron sangre caliente
soberbia de las venas
Hicieron el amor sobre una cama
Treparon árboles
y volaron sueños
Cada tanto alguna borrachera
el hígado inflamado de alcohol
de café
de tabaco y humo de papeles blancos
Alguna vez leyeron un best seller
Tuvieron hijos
les contaron cuentos
Un día
masticaron anfetaminas
y tragaron cápsulas de misticismo ajeno
Fueron hombres.
Son uno
o son varios
Son huesos pelados
y arterias vacías
Son sexos huecos
que aliteran la oscuridad de la caja
Fantasmas sin fluídos
Ni siquiera supuran
Ni siquiera se derriten
Ni siquiera huelen a podrido
Son uno
o son varios
son historias perdidas
en el desorden de las mortajas
son abandonos deshilachados en estrellas
De noche
por eso de la clandestinidad
de los suspiros
de los ojos
de las voces
De noche
ellos
que regresan
ignorantes
ignorados
amalgamas de silencio
y soledad
Fueron hombres
Son cadáveres invisibles