Me pregunto dónde irá
la caricia huérfana de piel,
el beso preso por unos labios sellados,
la sonrisa marchita de tristeza,
la promesa muda en el silencio,
el abrazo robado al viento…
¿Se perderán para siempre?
Tal vez
quedarán en reposo,
esperando tu regreso…
Mientras, sentiré,
tímido
el roce de tu mano en mi mejilla,
suave
el tacto de unos labios vergonzosos,
alegre
la magia de una sonrisa reposada,
conmovido
el deseo atado a tus palabras…
sólo faltará tu abrazo,
poder rodearte entre mis brazos
y ser la brisa que susurre tu nombre…
¿Se perderán para siempre?
Si así fuere
ya no quedarán en espera,
serán parte de un adiós, y yo
aún en balde lo intentaré…
buscaré caricias entre los dedos de la gente,
preguntaré por unos labios cerrados,
romperé el silencio con gritos perdidos,
compraré al viento un abrazo dormido
y a todos diré que ya nunca los hallé, no…
Fueron un día
míos para siempre,
pero hoy
me pregunto dónde irán…