Te encontré escondida en la fina palabra,
en la sombra de un hilo colgando de un adiós,
con el penacho al filo de una tenue palabra,
con la furia oculta de un ciego ventarrón.
Si yo fuera acaso un pedazo de escarcha
que mortifica el eco con un flechazo de amor,
si yo fuera el crujido de la amarga quebrada
que suena incesante ante el dolor que partió.
Atado a una rama como un muerto dormido
me acompaña el suspiro de lo que pudo ser,
vi el delirio vestido de cruzada fragancia
como almas que laten al compás de los dos.
Cóndor: redondo. Suerte.
El Ingeniero
Bello.
Maverick
Bellas imágenes: «la sombra de un hilo colgado de un adios»/ «el crujido de la amarga quebrada»/»atado a una rama como un muerto dormido» para conformar un pequeño poema bien logrado. Suerte en el certamen.
Es hermoso. ¡Qué buen manejo del lenguaje! Felicitaciones y suerte en el certamen.
No me acaba de convencer. Un saludo y suerte.
Muy bonito poema, te felicito y deseo suerte en el certamen.
Tu forma de escribir me recuerda a José Ángel Buesa. Está lindo el poema, suerte !
Buenos versos:
«Atado a una rama como un muerto dormido
me acompaña el suspiro de lo que pudo ser»,