ZOOFABULA. Por Mauro Gonzalez Quarti

La langosta creyó caer entre amuletos ciegos. Allí el destierro fue fortuito para su placer, que aun enloquecía entre la margaza de la lluvia. La maleza déspota, lo dejaba entre altivo y distante cual crimen del vuelos secos y rasantes. Las antenas abrían su lánguido pensar. Su evolución cultivaba anchas praderas en el interior, de un caparazón forjado a lo largo de sus saltos. Valga la pena el vibrar de entre insectos que concurren a su encuentro: La mosca incesante zumba para no callar. La hormiga distraída, acarrea una hoja que resguarda su paso incisivo, sobre el fango seco y… Leer más

Artículos de tocador. Por Azur 200

Una navaja para cortar, aceite linaza y tarros de crisantemos. Polvillo de Nápoles para rellenar las líneas del mapa de la cara. Sombra de ojo, penumbra sobre los dos parpados. Esperlecente, mejor aún, tornasol. La esperma roja que gelatiniza los labios y los deja ubicados, uno sobre otro, sujetando ese quejido de rebuzno. Quejido de orgasmo, si es que existe tal cosa. Pintas para cada uno de los cabellos, de los pelos, pintas rojas. Pintas negras. Hasta pintas largas y blancas. Para cada uno de las pelucas, pelos pintados rojos. Esmalte de garra. Perfume de entrepierna. Crema de pezón. Talco… Leer más

Danza típica. Por Ulises Serrano E.

Y: Viste saco e’ huea no hay nadie aquí X: Todo indicaba que este era el lugar y ha esta hora, incluso yo… Y: ¡Sale mierda!, ya me tení chata. Tai’ siempre haciendo las hueas mal, teni’ que avisparte’ hueon. Confié en ti, vendí mi auto…(Se toma la cara), te pase plata para tus vicios culiaos. ¿Que mierda querí que haga contigo ahora? X: Corta tu hueveo, ya mira quedémonos un rato esperemos a ver si alguien más llega, derrepente aparece el vecino de este hueon y le decimos que nos diga donde esta la huea. Toma distancia de ella… Leer más

Relatos de Verano: ARROJADA 1. Por Carmen María Camacho Adarve

En una calurosa noche de agosto, cuando llegue al pueblo en labores de investigación .Me dirigí a unas mujeres que tomaban el fresco sentadas formando corrillo en hamacas de playa en la plaza. – Buenas noches –dije- ¿conoce usted a una famosa poetisa y narradora de su pueblo? -¿siiiiiiii? ¿Que? en Alcaudete hay una artista ¿de quien es? – …pues miren ustedes continué- no sabría decirle -ah ¡como se llama la muchacha? pues Carmen Camacho …¿Ehhh?, del pueblo dice que es… ¿tu la conoces Angélica? ¡Que va¡ – así, entreviste a casi todo los vecinos que tomaban el fresco en… Leer más

Retrato de cuerpo entero y mirada lasciva. Por Mario Sanchez

Solo comenzó a desvestirse, es un acto que ha hecho toda su vida. Pastizales húmedos con manchas de patos en lagunas frías, en costras gruesas de un óleo agrisado. La finalidad esta vez, quizá sería terminar en la ducha o vestir ropa de cama, pero es demasiado temprano para ello. Bajo esa capa de algodones y de lanas, en capas de abrigo, suéter y camisa, hay un par de hombros grandes y su pecho tiene las marcas de los huesos que empujan hacia arriba una simétrica andanada de relieves. El barretín de la pieza de género que cubre sus senos… Leer más

Relatos de Verano por Carmen María Camacho Adarve.

La primera cruzó el cielo a eso de las once y media de la noche, en su viaje de ningún lado a otro, y estoy segura de que el mar se agitó un poco. La segunda pasó media hora después, y a la medianoche el cielo se cubrió de nubes largas y lentas, el mar se volvió a agitar y yo pensé en irme a dormir porque me dolía el alma. Fue mi encuentro con las Leónidas, un grupo de asteroides que cada treinta y tres años llena el cielo de la Tierra con sus luces, algo semejante a las… Leer más