IV. EL PALACIO CASTELLANO (2). Por Francisco Arsis Caerols
IV. EL PALACIO CASTELLANO (2) Gracias a Dios que el frac que había tomado prestado de mi querido amigo Vincent era más o menos de mi propia talla. No es que estuviese en muy buenas condiciones, pero para el caso pensaba que era más que suficiente. Me sorprendió ver reflejada mi propia figura en el espejo, con aquel porte tan distinguido en mi persona, y que jamás antes había podido contemplar. No podía sentirme menos satisfecho, y realmente estaba deseando que llegase de una vez el momento del inicio de aquella velada tan especial para mí. Al traspasar el muro… Leer más