Personas que nos devuelven la fe en el género humano, 2 Por Marisol Oviaño

A pesar de que había estado más de media hora esperando en el andén, había perdido mi tren. Éste había llegado con un considerable retraso, los carteles informativos estaban apagados, y la gente se arremolinó tanto alrededor de los vagones, que sólo pude leer la pantalla del último: Algeciras-Puertollano. Sólo cuando el andén se quedó vacío, vi que en otros vagones ponía: Algeciras-Puertollano-Madrid. Demasiado tarde: mi tren salía sin mí. Y allí estaba yo, en la oficina de la estación de Córdoba suplicando a David que me ayudara. – Uf, viernes. Difícil: va todo lleno –dijo con cara de circunstancias-…. Leer más

Carta de un abuelo. Por Francisco Gragera

Hola,mi cosita: Soy tu presunto abuelo.Digo presunto porque tu abuela Ana Mari con mucho cariño,siempre me amenazó con la duda razonable de la supuesta paternidad del hombre.De cualquier forma me importa un rábano,ya que para tu abuelo(aitxitxe en Vascuence) tú comienzas a ser el Epicentro de mi vida y la estrella más relumbrante de mi universo. Desde ahora te voy a llamar «mi cosita»,porque en mi chochez y cuando he visto esas fotografías tan raras,casi chupándote tu dedito,no me queda otra solución que proclamarme abuelo de esa «cosita».La verdad es que cuando te he visto te he empezado a querer… Leer más

Silencio. Por María

Bajo el influjo de la tormenta, escribo una carta… Cuando la meto en el sobre me doy cuenta de que esa carta sólo contiene silencio, un silencio absoluto… No va en blanco el papel, no es eso. Son dos folios escritos casi completos. Son muchas palabras ordenadas en frases gramaticalmente correctas y precisas. El contenido es coherente, todo tiene sentido… Y sin embargo, en ese sobre he metido unos folios llenos de silencio… María Leer más

Puzzles. Por Anita Noire

  “Sólo una vez en la vida te encuentras a una persona que encaja a la perfección contigo. Cuando encuentres a la que encaja, agárrate a ella y no te importe lo que haya hecho en el pasado. Nada de eso importa. Agárrate, es lo único que importa”.   Este fragmento pertenece a la novela de Michael Connelly “El último coyote”.   __________________________   La primera vez que lo leí me pareció algo realmente bello, muy romántico y rotundamente falso. Hoy, releo el fragmento, me sigue pareciendo literariamente bello y terriblemente falso. El mito del amor romántico ha hecho tanto… Leer más

Un lugar para vivir. Por María

Me dijiste que me quedara a vivir en tu corazón, “¿dónde exactamente?” pregunté, y sin pensarlo me ofreciste gentilmente tu ventrículo izquierdo: “ahí seguro que te sientes cómoda” dijiste “tienes tanta facilidad para que tu cuerpo se adapte a los espacios más insólitos…” y reímos recordando lo bien que me acoplo siempre sobre una roca, o sobre el tronco seco y caído de un alcornoque, sin que las rugosidades de una y otro me hagan daño. Reímos de esa facilidad mía para acomodarme a los lugares más extraños, esos que tú no soportabas porque torturaban tu espalda y tus manos,… Leer más

Sobre los ojos y las miradas. Por Mar Solana

Hace unos meses releí “Háblame de ti”, de Lola Duque, libro ganador del Primer Premio Robin Book de Narrativa New Age en 1998. Lo encontré, por primera vez, en un momento de mi vida en el que sus palabras fueron como abono para una tierra débil y asustada. Porque yo creo en las relaciones mágicas con los libros y las letras; leemos el que necesitamos para los «deberes» que nos marca la Vida en cada etapa. En esta segunda lectura, me quedé atrapada en este precioso párrafo que habla de los ojos, de la mirada… Miradas esquivas, miradas del demonio,… Leer más

El sendero. Por Francisco Gragera

Mi padre, que se marchó por la puerta trasera sin decirme adiós, era un ferroviario que una maldita enfermedad le dejó tirado en un Hospital de Madrid, con el silencio de los muertos. Siempre lo busqué y siempre me contestaban que estaba en el cielo. ¡Qué crueldad!. Mi madre, porcelana fina envuelta en el manto de sus rezos, quería que su hijo fuera Cura para poder ser la ama de llaves, tan en los pueblos, allá por los años del franquismo de los setenta. También ella, sin conseguirlo, se fue deprisa cual ráfaga de viento abre una ventana. Solamente conoció… Leer más