Lloraba la luna
sus versos de plata…
En la oscura noche,
invierno de escarcha,
bajo un frío intenso,
solos, en la plaza,
tu cuerpo y el mío,
se fundía en abrazos
profundos del alma.
Abriste los ojos
con profunda calma…
Me pediste un beso;
tu boca escarlata,
rociaba en mis labios
su dulce fragancia.
Se oía la fuente
romper en el agua…
Su gemir sonoro,
mostraba la vida
y la que se acaba,
porque el tiempo sigue
y todo lo alcanza.
Caía la nieve
temblorosa y blanda
sobre tus cabellos;
tus manos heladas,
cruzaban las mías
con candor eterno.
Y tú… ¡suspirabas!
Fue mi amor tan grande,
que hoy, desde esa plaza,
que antaño contigo
su fuente escuchara,
aún siendo la misma,
siento un gran silencio,
soledad, distancia.
Y es, que el tiempo innoble,
el mismo que entonces
tu bella silueta
amor me entregara,
hoy deja recuerdos
de bellas sonrisas
y eternas nostalgias.
——–
Juan A Galisteo Luque
Derechos registrados
Del poemario: Romances en la penumbra
Hermoso romancillo hexas
Ana, muchas gracias por tus amables palabras, siempre fue el romance uno mis poemas preferidos, estilo que a pesar de su antig