Amanece, me parece mágico este momento; los primeros rayos del sol me envuelven dándome los buenos días, juguetones. Ya vienen mis pequeños amigos cantando, esta vez son muy numerosos, se posan sobre mí haciéndome cosquillas, tantas que no puedo dejar de carcajearme. Siento la leve caricia del aire que viene para ayudarme, sopla fuerte hasta que parte de ellos levantan su vuelo; me relajo. Alguien se acerca corriendo con respiración controlada. Pasa de largo, sus zancadas se alejan. Algo le hace retroceder, se detiene frente a mí. Me abraza, me gusta mucho, le doy mi energía para demostrárselo. Se marcha pero seguro que volverá.
Dolores Moya Gómez
Me encanta todo, esa primavera bien definida y un abrazo sorpresa, a quien no le gustar
Un excelente micro, Lola. Primaveral y optimista. Lo primero es oportuno, lo segundo muy conveniente en los tiempos que corren.
Enhorabuena.
Un microrrelato encantador, que rebosa sensibilidad y est
Creo que en alg
Quiero daros las gracias a los cuatro; Hortensia, por tu apoyo incondicional. Atticus, porque siempre est