he prolongado el eco de sangre a que respondo
y espero sobre el surco como el arado espera:
he llegado hasta el fondo.
Morena de altas torrres, alta luz y ojos altos,
esposa de piel, gran trago de mi vida,
tus pechos locos crecen hacia mi dando saltos
de cierva concebida.
Ya me parece que eres un cristal delicado,
temo que te me rompas al mas leve tropiezo
y a reforzar tus penas con mi piel de soldado
fuera como el cerezo.
Espejo de mi carne, sustento de mis alas,
te doy vida en la muerte que me dan y no tomo.
Mujer, mujer te quiero cercado por las balas,
ansiado por el plomo.
Sobre los ataúdes feroces en acecho,
sobre los mismos muertos sin remedio y sin fosa
te quiero, y te quisiera besar con todo el pecho
hasta en el polvo, esposa.
Cuando junto a los campos de combate te piensa
mi frente que no enfría ni aplaca tu figura,
te acercas hacia mí como una loca inmensa
de hambrienta dentadura.
Escríbeme a la lucha, siénteme en la trinchera:
aquí con el fusil tu nombre evoco y fijo,
y defiendo tu vientre de pobre que me espera,
y defiendo tu hijo.
Nacerá nuestro hijo con el puño cerrado,
envuelto en un clamor de victoria y guitarras,
y dejaré a tu puerta mi vida de soldado
sin colmillos ni garra.
Es preciso matar para seguir viviendo.
Un dia iré a la sombra de tu pelo lejano,
y dormiré en la sábana de almidón y de estruendo
cosida por tu mano.
Tus piernas implacables al parto van derechas,
y tu implacable boca de labios indomables,
y ante mi soledad de explosiones y de brechas
recorres un camino de besos implacables.
Para el hijo será la paz que estoy forjando.
Y al fin en océano de irremediables huesos
tu corazón y el mío naufragarán, quedando
una mujer y un hombre gastados por los besos.
Dramatizado por el espectáculo “Poesencia”.
Esta»Canción del esposo soldado»fué en nuestro recorrido por la poesía de Miguel Hernandez,algo muy emocionante,nos implicamos en el sentimiento de un hombre que desde la distancia y en plena guera civil,recibe la noticia de que su mujer está embarazada.
Intentando ponernos en su lugar llevamos a la bailarina(Josefina su mujer),a su imaginación(el no la ve en ningun momento del poema) mientras el poeta imagina,sufre y siente,»dentro de la ilusión por ser padre»,la tremenda tragedia en la que están inmersos…es terrible el verso.»Es preciso matar para seguir viviendo…» y bueno creemos que es un poema tremendamente gráfico y de una calidad espepcional,como otros muchos de Miguel Hernandez.
Y bueno elegimos el piano como música de fondo por la fuerza de la partitura,
Ojalá lo disfrutéis tanto,como nosotros preparándolo.
Un saludo:Teatro Interior.
sólo comentaros que nuestro grupo se llama «teatro Interior» y e espectáculo que estamos llevando a cabo actualmente se llama «Poesencia»
Un abrazo.
Maite (Teatro interior)