Soy olvido.
Soy solo un grano de polvo
perdido en el universo.
El eco de una palabra
que pretende ser un verso
Una ínfima molécula,
confundida entre la nada,
que no dispone de tiempo
para alcanzar la mañana
No habré desprendido un brillo
en la inmensa nebulosa
cuando de forma forzosa
la vida se me haya extinguido.
El mundo estaba cansado,
cuando se abrieron mis ojos,
de ver que todo el pasado
en el polvo era un despojo
No soy nada, soy olvido,
un ajado pensamiento,
una voz que se ha perdido
empujada por el viento
Cuántas vidas hay ahora
en distintas latitudes
que se enfrentan sin demora
con las mismas inquietudes.
Entablan dura porfía
por conseguir unos sueños
y pretender que algún día
lograr ser de ellos sus dueños
Nos creemos distintos,
nos sentimos especiales,
y con ideas geniales
le jugamos al destino.
He viajado hacia el pasado
sus callejas recorrido
eran lugares de antaño
que hoy me resultan vacíos
De aquellos mis años mozos
apenas quedan amigos,
en el transcurso del tiempo,
se han muerto o han partido,
Sintiendo el aliento frío
de una tarde desolada
enredado en el vacío,
la respuesta me fue dada
Un pueblo rural, tendido
a orillas del Alhama
me mostró la importancia
de la vida, y su arrogancia.
Huele a pienso, canta el gallo.
cruza la calle un caballo
Polvo y sol sobre el camino
hasta el portón enrejado.
El abandono reposa,
junto al amigo de infancia,
en la arrinconada fosa
donde sus huesos descansan
