Cuando el alma recuerda…
… todas las nostalgias nacen vivas,
la sangre las memorias habla i besa
abriendo resquebrajos cuando baila
pinceles sobre el barro de una tierra.
Recuerdo las paredes quemadas en verano
por nuestro imberbe aliento,
firmadas por las huellas del despojo de las ropas
que siendo viento reían.
Recuerdo el hogar hecho de pensamientos colgados
calados como en agua,
que mecían nuestras ánimas inyectadas en espuertas
de una mañana bizca.
Los muros mimados en aromas de buen pan
i de placeres dulces
contados por la pérdida de un espíritu con infancia
que hoy grita y nos nutre.
***
Hoy respiro chapoteos en los charcos,
los mismos que de niños mojábamos con risas i con ecos,
hoy le pinto al blanco yeso mil caricias, mimos que nos hicieron verso.
Hoy audaz miro las manos,
Las manos desangradas por el alma,
que enjuagan su color en una acequia tornando cabal vida si se escampa.
El gozo de ver llegar los abriles preciosos
i hacer las liquidas migajas pura paz,
de exponer a bombo y platillo nuestra hambre
de que llegara aquel maná por ser asaz
a hervir en cazo de oro corto en carne.
Esencia de ser amado en el ocaso como jazmín
espera rebrotada por la tarde, espera que por fin llega a su fin.
Memorias de avaricia de la tierra
que hacen la espera aterradora y más vibrante
de aquellos que dependen de su fruto
un fruto que en nosotros es de amante.
***
Mas lo que más añoro de esas horas
son las tardes lentas,
columpiadas con el paso de viejas fotos
con olor a rosas,
con olor a lluvia,
con olor a leña.
Con olor a baraja enmohecida
jugada por los viejos sin la siesta,
sermones de balón y porcelana,
canciones que acunaban a muñecas,
Carreras del huir de miembros flacos
con gritos arrullando travesuras,
el frio del cristal en mis narices,
el enhebrar del hilo en una aguja.
Trayectos hacia el cine con amigos
el calentar las manos con palmadas
el dar vueltas y vueltas mareados
el estrujar con risas nuestras faldas.
La espera bajo alones de tejado,
abuelas que nos mueven la cabeza,
el ruido de paraguas disparados
y un alma que es feliz cuando recuerda.
Estimad@ Juliette, pues es para estimarte tras pasearme por tus versos, olores, chapoteos, abriles que pasaron i pasarán, tardes columpiadas, migajas de paz, huellas, paredes cálidas de hogar, ser amada o amado, aunque sea en el ocaso, ies latinas i ese alma feliz, de lágrimas de añoranza, que acunan ese dulce recuerdo. Gracias.
Gracias Nick Drake, no sabes cuanto agradezco tus palabras.
Hola Juliette.
Me confunde tu desarrollo del poema porque en él reconozco verdaderamente esencia poética. Y sin embargo el uso repetido de la «i latina» como conjunción sustituyendo la reglamentaria «y griega» me han creado un gran desconcierto; mucho más sorprendida me hallo,si cabe, porque tus versos ponen de manifiesto tu capacidad con el uso de los adjetivos tanto, como por el lenguaje poético y otros recursos nada desdeñables.
A falta de cualquier otro comentario me ha parecido importante hacértelo llegar, junto con todo el respeto que me merecen tus versos. Mi enhorabuena por lo que yo considero un hermoso poema.
Un abrazo.
Muchísimas gracias por tu comentario. Solo te puedo decir que el desconcierto que puede generar una falta ortogràfica repetitiva siempre que no afecte a la esencia de lo que se quiere transmitir, «puede» que te impida ganar un concurso, pero hace que tu poema sea tuyo.