179- Atardecer. Por Ronsard

Atardecer

 

Las sombras se alargan

proyectadas por el campo.

Por la ladera en calma

cantan los esquilos del rebaño.

 

El sol agonizante besa el campanario.

Un vuelo oscuro de vencejos

roza la torre con sus alas,

la niebla se restriega entre lo álamos.

 

El día muere

cae la tarde

el viento silba

en los mimbrales.

Atardece sobre el valle.

La tarde se va a otra parte.

 

En el clarooscuro

del pueblo en la penumbra,

se encienden las luces de las calles.

El crepúsculo se aleja

ladra un perro.

A lo lejos,

canta el cárabo.

 

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Un comentario

  1. Muy hermoso tu poema Ronsard. Se puede sentir la muerte sosegada del día entre los primeros bostezos sonoros de la noche.
    Me ha encantado. Enhorabuena y un abrazo.

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