115- El arte. Por Pechorin

El arte

 

Sus manos cincelaron durante noches

bajo la abstracción de luces estroboscópicas.

Hasta que por fin consiguió terminar su trabajo.

Era una obra informe y extraña,

engullida por otra masa más grande

de la que intentaba escapar vanamente

en un aire de instantánea mortalidad.

Era un algo vuelto hacia adentro.

No era nada.

Esto es lo que he creado, dijo ella.

Una imagen nueva y desconocida

para el mundo.

Es monstruoso, dije yo. Dame al martillo.

 

 

Comparte con tus amigos.

5 comentarios

  1. Voto por este poema.

  2. Fuciona. Aunque no me convencen las luces estroboscópicas.

  3. Voto por este poema.

  4. La chica del vestido verde

    Ciertamente oscuro pero me gusta su sencillez

Deja una respuesta