182- Donde la huella. Por Tadeus

Donde la huella

 

No consigo quitarme la manía

de mirar a lo alto: cielo abierto

o bien la parsimonia de las nubes,

su blanco viaje inmotivado.

Pero arriba no late la materia;

es abajo la vida, a ras de suelo,

a la altura mellada de los pies,

donde la huella:

lombrices delicadas, las arañas

geómetras, la grama,

mínimos soles en las margaritas,

cangrejos percutiendo las arenas,

pezuñas embarradas, el trabajo

tenaz de las hormigas,

el latigazo de la comadreja,

lluvia fina de polen

en las tardes milagrosas de mayo.

 

Tiendo la mano hacia esa vida, pozo

colmado de latidos, sangre sabia.

El viento esparce brotes,

se desata la espuma.

 

 

2 comentarios

  1. Mirar para arriba sin perder la vista de lo diario, no es mala mezcla. Bonito poema.

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