No solo se trata de ser atractiva y guapa, que lo es, pero cuando se suscita la admiración mayoritaria, no solo de los caballeros, sino también de las damas (algo mas infrecuente, reconózcanlo señoras mías), es porque hay algún detalle peculiar en la trastienda del escaparate. Personalidad sin duda, queda claro que tiene carácter, conversación inteligente y una simpatía espontánea de natural elegante y acrecentada, además por una armoniosa vestimenta juvenil y desenfadada a la par que ligeramente sugerente.
Janna se ha ganado, sin pretenderlo siquiera, el título de Miss Literatura 2006 por su saber estar, encajando en cada escena del filme de los acontecimientos, exacta y proporcionadamente, haciéndose notar sin estridencia alguna, tan fácilmente como florece una rosa, sin percibirla, hasta que su aroma inunda todo el ambiente.
Hemos dicho miss, pero déjenme que cambie el título por este otro: Dama Literatura 2006. Quizá hoy me siento más caballero que de costumbre, uno no tiene más remedio que crecerse y ponerse a disposición de todas las espléndidas damas del canal literatura.
No puedo menos que dar las gracias a quien tan alto criterio tiene de mi. Desconocía que existiera esta nominación y de hecho creo que he sido la última en enterarme de ello, pero como digo, no puedo por menos que dar las gracias; creo que todos estos calificativos juntos en mi persona son un poco excesivos, lo cual no significa que mi estima se haya elevado considerablemente.
Acudí al III Certamen de Literatura en calidad de acompañante de un usuario, y mi único propósito era, debido a que no soy muy habitual del canal, estar a la altura de las circunstancias y por descontado de la altura intelectual de los y las asistentes, puesto que este aspecto tengo mucho que aprender. Sinceramente esperaba estar en segundo plano aunque parece ser que no lo he conseguido. Me siento muy halagada por todo ello, pero creo el resto de “las damas del canal” no merecen menos, en absoluto, pues tengo que decir que, para mi (muy grata) sorpresa , han sido ellas las que con su buen hacer, simpatía, educación y alegría, han hecho que me sintiera como en mi propia casa. Damas eran todas.
…………. agradecida Janna.-
Mmmm. Y yo sin enterarme. Después de la hipotiposis perpetrada por sextavoce no tengo más remedio que procurarme un encuentro con tan alabada «dama». Voy a desencadenar la mecánica incontestable de mi evidente atractivo en sus dos versiones: estática, (dejándome hacer) y dinámica, (haciéndole algo).
Como el primero no está en mi mano confío en la hipótesis de un encuentro casual en la misma escalera. En definitiva el amor consiste en deslizar la vida por los suaves ascensos de las escaleras, coincidiendo en todos los peldaños. (Mirarse en los descansillos es imprescindible).
En cuanto al atractivo dinámico, a la vista del gusto lirico-literario de la dama en cuestión, dudo entre componerle una endecha con acrósticos iniciales, o unos tercetos encadenados con un serventesio final de rendición absoluta, o unos clásicos hexámetros grecolatinos con pariambos, o prosas poéticas con inteligentes y mundanas sicalipsis, o un trocaico de siete pies con sus respectivos troqueos, yambos y espondeos. Sin embargo he decidido intertextualizar una jitanjáfora de Mariano Brull, con la esperanza de que capte eufonías, acentos estróficos, cesuras y encabalgamientos, que no son sino el bendito ritmo de la vida:
Filiflama alabe cundre
ola olalúnea alífera
alveolea jitanjáfora
liris salumba salífera.
Olivea oleo olorife
alalai cánfora sandra
milingítara girófora
ula ulalundre calandra.
Janna, las jitanjáforas no se dirigen a la razón. sino más bien a la sensación y a la fantasía, las palabras no buscan un fin útil, juegan solas.
Tú me entiendes… (o deberías)
Pues yo creo que tiene nariz de periquito