El eco de mi nombre de Isabel Romero Casas es una novela histórica que rescata los años 50 de nuestro país, en plena dictadura, y nos habla de una mujer que, en mitad de la algarabía de su inminente boda, descubre un importante secreto sobre ella misma y su familia. Una excelente puesta en escena de una escritora en ciernes.
«La libertad es el bien más preciado del ser humano».
1– El eco de mi nombre abre con dos referencias a la libertad. ¿Por qué?
Porque la libertad es el bien más preciado del ser humano y en la época en la que está ambientada la novela la mayoría de los españoles carecían de ese bien, en especial las mujeres. A una mujer se le decía la ropa que tenía que usar, con quien debía casarse, como debía pensar….
Da igual las posesiones que tenga el ser humano si carece de libertad de pensar, de obrar o de amar. Si lo tienes todo, pero te falta la libertad entonces no tienes nada.
2– ¿Cómo definirías la novela en tus propias palabras?
Es una historia emotiva que con cada capitulo hace que el lector quiera saber más. Una historia en la que acabas encariñando de Mercedes hasta tal punto que puedes sentir el dolor que ella siente. Una historia que no deja indiferente.
3– Una de las primeras cosas que me gustó de El eco de mi nombre fue caminar por una Gran Vía madrileña en los años cincuenta. ¿Cómo es el Madrid de tu novela?
Es un Madrid que empezaba a despertar tras la época más dura de la posguerra. Sus calles estaba llena de puestos ambulantes y quioscos, de niños jugando y de cláxones sonando, con sus verbenas y chulapos. Si cierro los ojos me imagino la Gran Vía y un organillo de fondo sonando y casi puedo oler los puestos de churros de La Plaza de Callao.
También fue una época de despertar para algunos sectores de la sociedad con huelgas de obreros y manifestaciones de estudiantes, todas ellas reprimidas con mucha dureza.
4– Después nos trasladas hasta un pueblo de Almería, Los Antones. ¿Con qué contraste has jugado en este punto entre ambas ubicaciones?
Los Antones, al contrario que Madrid, es un pueblo anclado en el pasado, donde se respira tranquilidad y aire puro, donde sus casas son construcciones antiguas con paredes encaladas y la mayoría, por no decir todas, sin alcantarillado ni agua corriente. Los automóviles que circulaban por sus calles eran de gente pudiente por lo que se podían contar con los dedos de una mano.
Un pueblo donde todo el mundo se conocía y que miraba con recelo a los desconocidos que llegaban de visita.
5– Siguiendo con la ambientación que me parece de las mejores que he leído encontramos los cines Avenida, la discoteca Pasapoga… ¿Qué otros enclaves míticos podemos encontrar? ¿Te hubiera gustado conocer alguno en concreto?
Pues podemos ver el Hotel Atlántico, la Plaza del Callao, el Paseo de la Castellana, el Palacio de Justicia que había sido propiedad del Marqués de Fontalba y el barrio que más me impresionó cuando descubrí su existencia: el Pozo del Tío Raimundo.
De Madrid conozco poco y me encantaría conocer todos los lugares que he citado y por supuesto las historias que esconden porque deben ser apasionantes; pero no puedo negar que me gustaría visitar el Museo de El Pozo y conocer de primera mano todo lo relacionado con el padre Llanos.
6– También aparecen personajes históricos como Franco o Ramón Serrano Suñer, quizás menos conocido. ¿Cómo te has ido documentando para escribir la novela?
A mi siempre me ha gustado mucho la historia, en especial la de España y eso ha facilitado mucho la labor pues yo ya tenía unas nociones previas de la época. Aun así, consulté noticias y busqué referencias de él en varios libros.
Ramón Serrano Suñer era el cuñado de Franco por lo que hay bastante información sobre él. Fue un personaje muy importante, abogado y político español que tuvo un papel primordial durante los primeros años de la dictadura. Fíjate si fue importante, que fue uno de los promotores de la creación de la División Azul y llegó a estar presente en el encuentro de Franco y Hitler en Hendaya.
7– Otra curiosidad, Isabel, la moda. ¡Me gusta mucho que hagas hincapié en cómo se empieza a atisbar un nuevo estilo de vestimenta y cómo esto crea muchos rechazos!
Sí, es un tema muy interesante porque la moda es el reflejo de la sociedad. Es increíble que fuese tan escandaloso que se cuestionara la decencia de una mujer solo por la ropa que escogiese llevar. Si te das cuenta a la vez que Mercedes va evolucionando a nivel personal también lo hace en su manera de vestir y de peinarse.
8–«Cuando aquellos malditos republicanos intentaron tomar la hacienda, yo me acuartelé aquí con mi escopeta y no consiguieron acabar con mi vida». La familia Quiroga es franquista. ¿Es fácil escribir este tipo de frases en la actualidad cuando la dictadura está tan mal vista?
No, es fácil, me daba miedo que el lector pudiese mal interpretar mis palabras y que llegaran a considerar que estoy defendiendo una postura u otra; pero todo aquel que se lea o se haya leído El eco de mi nombre se dará cuenta que el tema político está tratado con mucha sutileza y con mucho respeto. He intentado reflejar las motivaciones de los personajes que le hacen pensar de una determinada manera y lo he hecho con personajes de ambos bandos.
9–El personaje de Mercedes Quiroga es muy inocente, ¿terminará por sorprendernos convirtiéndose en el personaje femenino fuerte de la historia?
Mercedes va a sorprender y mucho. El lector va a sentir desde el primer momento esa transformación y será testigo de cómo los pilares de su vida, que ella creía que eran auténticos, se van a ir desmoronando dando paso a una Mercedes totalmente distinta.
10– ¿Con qué próximas historias nos vas a sorprender?
Con mi próximo proyecto, que espero tener listo pronto, cambio de registro y me paso al género policiaco. El lector se va a encontrar con unos personajes muy potentes que, espero, no le van a dejar indiferente. Es una historia de actualidad que toca temas que no son desconocidos para nadie, pero a los que quizás, a veces, no les prestamos mucha atención.