Dioses del Sahara.
Sergio Álava presenta Dioses del Sahara, un thriller de acción y aventuras que supone su debut literario. Y la localización no es casual: Álava es un enamorado del Sahara, del que reconoce haber aprendido algunas de las lecciones más importantes de su vida y al que, como occidental, sabe perfectamente que hay que acercarse despojado de prejuicios y de toda creencia de superioridad.
Esa esencia es la que pretende reflejar en su novela, sirviéndose para ello de personajes y escenarios creados con especial mimo, pues afirma que, antes de plasmarlos sobre el papel, unos y otros conviven un tiempo dentro de su cabeza.
Lector precoz, emprendedor también desde muy joven, amante del thriller, la novela negra y la novela histórica, Sergio Álava se da a conocer, pues, a través de uno de los lugares más fascinantes de la tierra, un escenario maravilloso y feroz que lo cautivó para siempre.
Sergio, traes una novela que se desarrolla en el desierto cálido de arena más grande del mundo. Una localización exótica a la par que inhóspita. ¿Por qué esta localización?
Se dice que el Sahara no deja indiferente a nadie tras su primera visita y a mí me pasó eso exactamente, me cautivó. Es un lugar donde puedes experimentar el mayor sentimiento de soledad si te adentras en él. Ahí entran en juego factores que en occidente ni se nos pasan por la cabeza. Por poner un ejemplo si en una ruta larga tienes la mala suerte de padecer algo como una apendicitis, tendrías muy pocas oportunidades de sobrevivir. Por ello creo que el Sahara era la localización perfecta para enmarcar esta aventura.
Cuando pensamos en el desierto, parece que nos vienen a la mente conceptos de carencia y atraso social. Sin embargo, los habitantes del desierto tienen mucho que enseñarnos… ¿Qué opinas?
Cualquier habitante de un país diferente al nuestro, podrá aportarnos algo, siempre. En el Sahara eso se magnifica, porque sus moradores saben sobrevivir allí, de forma permanente, casi con nada.
En una ocasión, le enseñaba en Libia a un tuareg, cómo dentro de un brick de huevina, había el equivalente a 24 huevos. Él me dijo que aquella era nuestra tecnología, pero que ellos tenían la tecnología del desierto. Así que me invitó a acercarme a su coche y del maletero extrajo un bote de plástico con una tapa a presión. Parecía un recipiente de pintura reutilizado. Quitó la tapa y pude ver cómo estaba lleno de harina hasta el borde. Entonces introdujo su mano en el polvo y comenzó a extraer huevos frescos, había 24 huevos de verdad. Sonrió, porque nosotros con nuestros avances, no sabíamos llevar huevos frescos en coche por el desierto debido al traqueteo que los rompe sin remedio y teníamos que conformarnos con un sucedáneo. Esta es solo una pequeña fracción de lo que se puede aprender, si se presta atención.
¿En qué género/s deberíamos etiquetar tu novela, Dioses del Sahara?
Está construida como un Thriller de acción y aventuras, pero donde la acción se desarrolla de manera creíble y plausible.
Hay unas descripciones deslumbrantes en Dioses del Sahara. ¿Qué es lo que más has disfrutado escribiendo de esta novela: sus personajes, sus escenarios, la trama en sí…?
Esta es una pregunta difícil, quizás desarrollar la trama y entretejer todo para mantener al lector entretenido haya sido lo más emocionante. Aunque la construcción de personajes humanos a los que poder identificar e incluso entender ha tenido lo suyo también. Los escenarios están en mi cabeza y anhelo volver a visitarlos, aunque sea difícil ahora por la situación política.
Sergio, dado que no encontramos biografía en el libro sobre ti, ¿qué te parece si nos hablas un poco sobre tu vida?
Pues no hay mucho que contar o todo lo contrario, según se mire. Académicamente cursé hasta C.O.U, por la rama de ciencias y al terminar decidí ponerme a trabajar de verdad (ya lo hacía en ratos libres), me hice autónomo e inicié mi vida de emprendimiento que me ha llevado hasta hoy, donde sigo por el mismo camino.
En lo que se refiere al mundo literario, me gusta mucho leer, comencé sobre los 14 años con Odessa de Frederick Forsyth y me enganché. Mis géneros preferidos son el Thriller, la Novela Negra y la Novela Histórica, aunque no necesariamente por ese orden.
Como escritor me siento relativamente cómodo en el Thriller y en la Novela Negra y me encantaría ser capaz de escribir una buena novela histórica, pero se me antoja muy difícil.
Veo que has viajado a lugares remotos. Cuéntanos tres enseñanzas distintas que hayas aprendido en, también, tres países distintos.
Hay un par de frases que se han hecho muy conocidas y que a mí me las han dicho al menos una vez en el Sahara.
La primera es arrolladora: Prisa mata amigo, desierto muy peligroso.
Y la segunda no lo es menos: Vosotros tenéis los relojes, pero nosotros tenemos el tiempo.
Enmarcadas en el contexto de que quieres aprovechar hasta el último minuto de tu estancia y todo lo que te saque del desierto te parece una pérdida de tiempo. Vas a un taller por ejemplo para hacer una reparación en tu 4×4, indicas que tienes prisa y ellos te responden con estas perlas de sabiduría local.
Aunque son en sí la misma enseñanza, creo que es bueno tomar los dos ejemplos, ya que somos algo torpes de oído (en occidente en general).
La tercera fue en Tanzania, en alguna recóndita población. Ante mi pregunta de sorpresa de por qué todo el mundo iba con una sonrisa en la boca, nuestro guía de carretera, Ombeni, me dijo que todo el mundo tenía para comer 3 veces al día, una casa donde dormir y una familia con la que vivir. ¿Para qué quieres más?, me preguntó. Cuando le expliqué que aquí nos hipotecamos por 30 o más años, me respondió con un taxativo: ¡Estáis locos! Razón no le faltaba.
Sergio Álava
Dioses del Sahara se detona con un terrorista, sin embargo, esta no es la típica historia de terroristas que son perseguidos, sino que hay mucho más…
Así es, el terrorista es un personaje duro y despiadado y el terrorismo en sí casi no tiene presencia en la novela. Este libro va más de personas y de situaciones que dan sentido a la historia que se cuenta. Donde sus personajes se cruzan por casualidades de la vida o no y donde las acciones o elecciones de unos condicionan la vida de otros. Es un poco como la vida misma, pero en el más duro de los contextos.
Habrá una continuación de Dioses del Sahara que se desarrollará en Túnez. ¿Escribirás, aparte de esta continuación, otras historias en otros países remotos que tú mismo has visitado?
La segunda parte está en marcha y Túnez será el enclave principal. Me gustaría regresar al país para repasar y depurar escenarios y personajes, pero la actual coyuntura del COVID puede que no me permita hacerlo a corto plazo.
l Sultanato de Omán, me sedujo por sus paisajes y sobre todo por sus gentes. Hospitalarios, amables, comprensivos y tolerantes. Cuando encuentre la historia.
Dioses del Sahara está disponible en la plataforma de Amazon tanto en papel como en digital.