Los veo cada día bajar a la playa y me emocionan. Ellos no se dan cuentan, pero miro a hurtadillas y de reojo mientras compartimos un rato de sol y pienso cuantas historias así conviven con nosotros sin que prestemos atención.
Andarán en torno a los sesenta años, se adivina sin esfuerzo que ella tiene un movimiento muy limitado, se apoya en la muleta y en su hombre, solo así inicia algún movimiento. Él, por el contrario, está fuerte, carga con todos los bártulos y cuando ella descansa en la tumbona, hace varios ejercicios abdominales y de piernas para seguir manteniendose en forma.
No hacen aspavientos, su rutina es silenciosa pero medida, cuando llega la hora del baño, él la acerca con cuidado hasta la orilla y ambos se adentran en el mar donde mantenerse a flote y hacer ejercicios en el agua; cogiéndola de las manos la ayuda a nadar y moverse de un lado a otro. Una vez terminado el baño, otra vez él le acerca su muleta y juntos salen del agua hasta la tumbona. Sin mediar palabra, él saca el peine, el agua para beber y la acomoda. Juntos toman el sol, charlan con los vecinos, y dejan discurrir el tiempo bajo el sol.
Y así un día tras otro, una semana tras otra. Jamás les oído una palabra desentonada, ni una queja, sus miradas curtidas se cruzan cómplices, casi diría que se entienden así perfectamente y a veces les veo sonreír.
Trato de imaginarlos en su juventud, jóvenes y fuertes…enamorados.
No conozco su historia, pero entiendo que no ha debido ser fácil, ni lo es ahora, pero me admira profundamente como la cuida, la mima y atiende, como ambos asumen la situación con absoluta normalidad.
Cansada de oir noticias de violencia machista, hoy quiero hacer un homenaje a tantos hombres buenos que nos rodean, que pasan desapercibidos y nunca abrirán los titulares de las noticias. Seguramente viven en solitario su lucha cotidiana apoyada tan solo en su satisfacción personal.
Esta pareja es solo un pequeño ejemplo encantador que me conmueve.
Brujapiruja
Un texto precioso que ha conseguido que un escalofrío recorriera todo mi cuerpo. Pero lo más bonito de todo es que sea un hecho y no una simple historia.
Yo conozco una historia en la que el hombre tampoco saldra en los periodicos por ser un marido y un padre estupendo.Esta historia cumplira , el año que viene, cincuenta años.Durante muchos años su mujer le cuido mientras su enfernedad se empeñaba en reproducirse casi año tras año; apesar de los niños pequeños, los problemas laborales, la situacion politica del momento que todo lo complicaba etc.
Ahora, desde hace unos años, el es que esta pendiente de ella, el que le prepara su medicacion y se la pone alado para que no olvide tomarla, el que le recuerda que hay que ir al baño y que tome mas agua, el que va con ella al frigorifico a ver lo que hay que sacar para comer, el que hace recados y mira , mejor que muchas mujeres , las ofertas del dia, el que la tapa con la manta y le pone el calentador para paliar sus dolores musculares,el que saca el bolso que mejor le va con la ropa que puede ponerse etc etc.
Y asi podia contaros un sin fin de pequeñas historias que esta pareja viven a diario.
Saludos .Alosia
Gracias por los comentarios, ojalá llenaramos páginas y páginas de ejemplos parecidos. Estamos necesitados de ver la parte abnegada y fiel de muchas vidas que nos rondan.
Besos a las dos
Brujapiruja
La historia es muy bonita; está muy bien contada, de manera sencilla, como sencilla es la propia historia.En la búsqueda hacia nuetro bienestar nos complicamos la vida e ignoramos que la felicidad y la belleza están en la sencillez.
Muchas gracias brujita
Qamar gracias por pasarte por aquí y dejar unas palabras.
Besos de colores** (copy Merce) XD
Muchas gracias Luisa por acordarte también de los hombres y expresar tus observaciones y opiniones en este oportuno y bello texto.
Sin duda que hay buenos hombres y muchos, como también mujeres por todos los rincones y lugares, a pesar de toda esta triste prensa.acontecida
Generalmente, esos hombres que tú muy bien indicas no lo van pavoneando por ahí a los cuatro vientos. ¿Será cosa del amor; la necesidad de apoyo?
Y que sigan así, es ¡estupendo!, no tienen por qué cambiar ni ser de otra manera.
De siempre y de toda la vida he admirado esas actitudes, ya no solo en los hombres, -por el hecho de que con eso de su caballerosidad deben de dar ejemplo-, también lo he observado en muchas mujeres y he aprendido de ellos y de sus gestos, todo eso y aquello que luego después me ha ayudado a ser mejor persona. en la vida.
Te envío un abrazo Luisa.
Abrazo recibido Juan, es de justicia hablar de esos hombres que, como bien dices, no alardean de ese comportamiento y de ese amor, pues es sólo eso.
Gracias por tus palabras y por ser como eres, sensible y excelente persona.
Otro abrazo bien fuerte para ti.
Luisa