«Púrpuras las hojas que no ves cuando duermes y verdes las que ves cuando estas despierta. Debes mirar arriba cuando sueñes para poder verlas, orgullosas ellas siempre cayendo con el viento su único cómplice, y tomando a la tierra de reposo. Total si al final son solo minutos de una eternidad, la pradera púrpura de caprichos.»
Ernesto Miguel Muñoz Gonzalez