Hoy es día de limpiar bien los zapatos, ponerlos en lugar visible en el salón, brillantes y relucientes, para que los Reyes Magos de Oriente nos dejen alguna sorpresa. Es la noche donde todos esperamos un pequeño detalle y los peques no pueden conciliar el sueño entre la ilusión y los deseos.
Hay que dejarles algo para reponer fuerzas en esta noche agotadora, así que nosotros les dejaremos un roscón y vino dulce.
Y esperemos que no pasen de largo.
Felices ilusiones.
PD. Iros a dormir pronto 🙂
Brujapiruja