Madriguera de Historias: «Creadores en la red». Por Majomar

 

Aunque en otras regiones ya existen iniciativas similares de referencia, la Madriguera de Historias es un proyecto cultural que nace sin ánimo de lucro y con el único apoyo de Crearium, el espacio de co-working y actividades culturales y formativas de Monzón (Huesca).

Ainhoa Ollero, licenciada en comunicación audiovisual, y Jordi Ponce, dibujante de cómics e ilustrador, fueron quienes pusieron en práctica la idea. A primeros de mayo dieron el pistoletazo de salida a las inscripciones de la primera convocatoria, a la cual se presentaron escritores y artistas plásticos de distintas provincias de la geografía española y dos de ellos desde México D. F.

A los participantes se les invitó a proponer un tema sobre el que girarían todas las obras, tanto literarias como gráficas. Con las propuestas efectuaron un sorteo en el que salió escogido el tema: la incomprensión.

También por sorteo, se emparejaron artistas plásticos y escritores, que desde entonces trabajarían conjuntamente en la misma causa: contar una historia de incomprensión con total libertad creativa.
Hoy, el resultado se encuentra publicado en la página de Facebook y en la página web de La Madriguera de Historias.

El éxito de participación ha sido considerable, y esto se puede sentir al leer cada uno de sus diecisiete relatos y poemas: retazos de la vida que narran con diferentes voces y puntos de vista sus autores, dejando bien claro que existen «otros modos de comprender la incomprensión».madriguera

En esta primera convocatoria se han presentado 30 participantes (de ellos, 17 escritores, 10 ilustradores y 3 fotógrafos). Y teniendo en cuenta que no existen intereses económicos ya son muchos, lo cual viene a demostrarnos a todos una vez más que las grandes iniciativas nacen a menudo de manera individual, sin presupuestos previos, tomando el punto de partida en el esfuerzo personal, remando contra corriente frente a la negatividad, la ausencia de apoyos y la incertidumbre que siempre genera lanzarse a un proyecto como éste en solitario.

Aquí subyace el auténtico germen creativo, la aventura solidaria, exenta de apoyos económicos y gubernamentales, pero dotada de una revolucionaria carga de idealismo e ilusión que suma adeptos y la eleva hasta constituirse en todo un acontecimiento social de espontánea colaboración.

Los días 6, 7 y 8 de diciembre, La Madriguera de Historias expondrá sus creaciones en la XX Edición de la Feria del Libro Aragonés en la localidad de Monzón, donde nos preguntaremos si apostarán las editoriales por estas jóvenes promesas; si les ofrecerán la posibilidad de dar a conocer sus trabajos como escritores, pintores, poetas, ilustradores y fotógrafos.

Quién sabe si veremos nacer un libro llamado La Incomprensión, esa incomprensión a la que se han asomado treinta miradas, las treinta que han convergido en La Madriguera de Historias, o si más bien desviarán su mirada hacia otros menesteres (menos o más incomprensivos) las consejerías de Cultura, las fundaciones, las asociaciones culturales, o las editoriales…
Como siempre, los creadores tendremos que recurrir a la satisfacción del trabajo bien hecho, y aguardar a que «alguien» “alguna vez” lo reconozca y apueste por él.

Majomar

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