Como el agua, fluyendo
como el agua, fluyendo,
entra el veneno en la fruta del verano
y crecen los labios azules del anochecer
trasluce bajo tu piel ambarina
el insecto atrapado en la sombra de lo duradero
sí, hubo otra edad más única donde nacieron
los recuerdos para este hoy que acontece y marcha
la infección será por siempre
más intensa que en la víspera
y cada desaparición es una nueva canoa
que río abajo se desvanece
nos tuvimos, nos supimos
hombre y mujer desnudos
almacenándonos en el silencio
de los tiempos de la ceguera
no hemos existido nunca
por siempre indescifrables
sin embargo nos pedimos ayuda
y de alguna remota manera nos la concedimos
vuelvo hoy al recuerdo de la habitación de tu sonrisa:
fuimos acontecimiento, fuimos tiempo,
pasarán los días, vejez, adormidera,
pero esta nada que tuvimos queda
David Pérez Pol