Nos robaron el brillo de nuestras miradas
Confundiéndonos con luces artificiales
De mil colores,
Sin prepararnos apenas para
Un mundo de mayores,
Donde el canto de un villancico
Es una oda a la nostalgia
Y donde la magia y la paz
De una noche se truncan
En una cena dedicada a los
A U S E N T E S
© Isidro R. Ayestarán, 2007
www.isidrorayestaran.blogspot.com – NOCTURNOS