Destello ceñido a barlovento
Alza al soplo su taciturno mirar
Advirtiendo la atmosfera de su piel,
Ambiciona yacer lágrima del llanto que susurra.
Hombre impávido a razón de su eco
Titubea ante la veracidad que presencia
Embaucando su propio entendimiento
Anhela ser jugo, polvo, aire.
Animal despeñado en vida
Tiñe el pensamiento de su inherente fin
Concibiendo el esplendor de la lágrima vertida,
Sucumbe agonico, sucumbe feliz.
Francisco Baeza Ballesta
Es una satisfacción saber que aún quedan manos y almas capaces de escribir algo tan sentimental y profundo sobre el ser humano. La lástima es que no hay tantas mentes capaces de comprender el significado de tu escrito como a algunos nos gustaría, pero aún así, nunca dejes de luchar.
Enhorabuena por tu poema.
Muy muerto a la vez que muy lleno de vida tu poema, me encanta la evolución de «destello,hombre,animal», felicidades
He tenido que leerlo y releerlo para entenderlo y me gusta muchisimo tu poema, besos!
hola , yo fui comprañera tuya del san jorge es un poema precioso un beso.
me quedo loco contigo baeza, tambien escribes de puta madre? siempre fuiste el más listo cabron, sigue comiendote el mundo surmanoh estes donde estes jajajajJA un abrazo