Capítulo no resuelto.
Yo amaba más.
Y se fue.
Hoy los recuerdos no me quitan el sueño.
–
Capítulo resuelto.
Alguien buscaba algo que no era yo.
Yo sólo quería.
Hoy come felicidad en panes integrales.
–
Capítulo por resolver.
Tengo sacos de vida gastada.
No espero milagros.
De amor sí se puede morir.
–
La pena es no olvidar el recuerdo
ni enfriar calores de fríos que fueron,
siendo hoy, si acaso son reales,
parte del todo que no puedes darme.
–
Cuando grito en silencio
se llena el hueco de lo que clamo
y te puedo mirar, si justo es llamar mirada
al pacto de mi alma serena con tu piel,
con las pupilas que me regaló
quien algún día dejó de ser carne
para divinizarse en simple y único aire.
–
Puedo ver tu viento invisible
haciendo opaco lo transparente.
Yo puedo construirte en la tierra
lo que sólo en un cielo se imagina.
–
Pero el tiempo mata, amor
y es sólo consejero de una idea
que no se piensa,
no se siente
y no se ama…
Verónica Victoria Romero Reyes
Atraméntum.
Derechos registrados.
Blog de la autora
Un buen poema lleno de libertad, sinceridad y amor. Mis saludos desde este portal literario poeta.
Juan.
Muchas gracias. Eso mismo pienso yo.