Despertad… queridos príncipes:
Ya sé que hace frío, y que el calor de los abrazos cesó la pasada primavera.
Y que hay color negro, y ventanas que se cierran. Y mucho silencio en vuestras vidas.
Pero creedme cuando os digo que existe un lugar donde el amor ya no es una quimera, y que jugaremos a ganar en esta loca aventura de la vida.
Sólo hace falta que le cantéis a vuestros corazones la vieja nana que entonabais de pequeños.
Mis pequeños príncipes…
DESPERTAD AL SUEÑO.
© Isidro R. Ayestarán, 2008
NOCTURNOS www.isidrorayestaran.blogspot.com