Entrevista a Lorenzo Silva, Presidente del IX Certamen de Narrativa Breve. Premio Planeta 2012

Hace ya algunos años que seguimos la trayectoria de Lorenzo Silva, un escritor que ha ido afianzándose en el mundo literario pausadamente, con iniciativa, criterio y mucho trabajo. Desde que lo conocimos, queríamos que presidiera el Certamen de Narrativa Breve, porque vemos en él al escritor que sabe ganarse al lector con perseverancia y buen hacer, una persona accesible con convicciones pero de serena argumentación, un amante de los libros pero que sabe afrontar el reto digital con audacia. En definitiva, un ejemplo a seguir que, en la Asociación Canal Literatura, valoramos como excelente.

Este año, al fin, conseguimos encontrar un hueco en su apretada agenda para que fuera nuestro presidente. Desde aquí, queremos agradecerle a Lorenzo Silva el tiempo y la atención que nos está prestando.

Entrevista

«La obra de un escritor es un asunto que ventila consigo mismo, y si acaso, pero sólo después, con sus lectores.»

En la primera entrevista que le hicimos en el año 2010 ya hicimos mención a su curriculum, a sus libros y premios y nos contestó a las preguntas de rigor que hacemos siempre a todos los escritores, hoy haremos otro tipo de preguntas que nos preocupan y además intentaremos conocer mejor al escritor, sus proyectos y la repercusión del último premio recibido “Premio Planeta 2012”.

Creemos que usted es un hombre apasionado y vital, con objetivos, conciliador, sereno y perseverante ¿se considera además un romántico? ¿un soñador? ¿un quijote? O simplemente una persona positiva.

Soy bastante soñador y bastante quijote, pero digamos que he acercado mi vida a lo que soñé que sería y que mis quijotadas me han traído más alegrías que manteos, lo que me convierte necesariamente en un optimista.

¿En los dos últimos años qué aspecto de su vida ha cambiado más?

Bueno, volví a casarme, acabo de tener una hija. Lo demás es bastante accesorio en comparación.

¿Tras recibir el Premio Planeta se plantea nuevos retos?

Siempre me planteo nuevos retos. El Premio Planeta no introduce la más mínima diferencia a ese respecto. La obra de un escritor es un asunto que ventila consigo mismo, y si acaso, pero sólo después, con sus lectores.

Usted preside la IX edición del Certamen de Narrativa Breve que se fallará en breve. ¿Cómo se viven los premios desde uno u otro lado?

Cuando contribuyes a decidirlos tienes más responsabilidad, y por mi parte trato de ser ese jurado que cuando me he presentado yo, y sobre todo cuando me presentaba en los primeros tiempos, me habría gustado que leyera y valorase mi trabajo. Así que siempre leo lo mejor que puedo y trato de ser objetivo, sin darles a mis gustos personales más peso del inevitable.

¿Qué importancia tienen los premios en la carrera de un escritor?

Depende del escritor. Pero en el panorama editorial y lector que ahora tenemos, son una muy buena palanca, sobre todo si tienes la suerte de poder ganarlos con libros que aporten algo diferente, algo que no está a priori bendecido por las leyes del mercado, y que de otro modo saldría adelante con muchas dificultades, o de forma más invisible y marginal.

¿La publicación en formato papel es el único objetivo final, el que define si un texto es relevante, arte o de calidad?

No necesariamente, pero hoy convendremos en que un texto de veras relevante no deja de editarse en papel. Dentro de 20 años, no sé qué te contestaré.

Lorenzo Silva - La marca del meridiano

Habla de su último libro “La marca del meridiano” como un conjunto de metáforas, presente-pasado, Barcelona-Madrid, ciudadano normal-delincuente, hombre-mujer, funcionario-héroe literario. ¿Cuántas lecturas esconde este libro?

Como todos, tantas como lectores. Mis personajes son ambivalentes en muchos sentidos, y además recurren mucho a la ironía. He podido advertir que unos lectores la captan, y otros se quedan en la interpretación literal. Pero ambas opciones pertenecen a la legítima soberanía del lector, al novelista le toca desaparecer detrás de sus criaturas.

¿Todos tenemos un meridiano individual que separa varias personalidades?

Sin duda. Salvo los que no dedican mucho tiempo a pensarse.

Organiza cada año Getafe Negro, festival de Novela negra y habla del investigador y su contribución al bien social como representante de las víctimas. La novela negra está en auge. ¿A qué cree que se debe?

Es un género eficaz de cara a la persuasión del lector, con una larga y fecunda tradición, a estas alturas, y especialmente oportuno en tiempos de zozobras. Creo que ya son tres buenas razones, aunque la mejor es que haya buenos autores escribiendo buenos libros.

Se habla mucho de Cultura en general y su protección. Hemos ido a la Rae y nos hemos encontrado esta definición que según la primera acepción significa CULTIVO. Si aceptamos la segunda acepción que dice que cultura es un conjunto de conocimientos que permite desarrollar un juicio crítico ¿Internet es cultura?

Como todo, como la Biblia o un violín, depende de quien lo use, y para qué. Con la Biblia puede calzarse un mueble y con un violín puede jugarse al béisbol, dos usos poco culturales. Pero si uno recita el Cantar de los Cantares o toca una pieza de Schubert, hay cultura sin duda alguna. Igual que cuando se usa Internet para conocer y dar a conocer creaciones humanas valiosas.

Cuando se habla de proteger la cultura ¿de qué hablamos exactamente según usted? Cultura literaria, cine, música, modos de vida, costumbres, conocimiento científico o industrial…

Yo creo que todas ellas son dignas de protección, en tanto que todas ellas son expresión del ingenio humano y son susceptibles de enriquecernos como personas, espiritual y también económicamente. Para mí esa protección debe ir vinculada estrictamente a favorecer el desarrollo de la cultura (sin dirigirlo ni prestarle muletas que no necesita) y a impedir que de esa riqueza se aprovechen ilegítimamente los parásitos que no la construyen.

¿Qué entiende usted por Creador? (Segú la RAE: Que crea, establece o funda algo.)

Le quitaría la mayúscula. Creador es cualquiera al que no le basta la realidad dada y siente la necesidad de aportar algo nuevo y diferente. Y valioso, claro está.

¿Qué diferencia a un creador que escribe o canta de un creador de gráficos, fotógrafo, programador o de aquellos que fundan o establecen nuevas formas de comunicación?

El lenguaje y los recursos con los que construye su creación. No veo una diferencia esencial.

Le hemos oído decir en una entrevista que un libro es algo más que el producto del creador, también del editor, el corrector, el maquetador, el publicista o el ilustrador. Le pongo un ejemplo: Todas esas funciones se realizan en Canal Literatura para publicar y dar a conocer escritores y contenidos en Internet. ¿Podría considerarse una editorial digital?

Desde el momento en que aglutina todas esas funciones, indudablemente. Para mí un editor es aquel que defiende los libros, aquel que asume como propia la causa del escritor y lucha por ayudarle a abrirse paso en las mejores condiciones.

¿Usted cree que hay conciencia de que subir contenidos a la red es publicar de forma global?

Me parece que no siempre. Desde luego no cuando se hace ilegítimamente y se pretende que es “una copia privada”. Y tampoco algunos creadores son conscientes del potencial difusor de la red.

Sabemos que en España muchos editores están pidiendo a escritores y profesores de universidades que retiren de internet contenidos ya publicados para que sólo se pueda acceder a ellos a través del formato libro ¿Qué opina de esta conducta?

Cada uno es dueño de hacer con su creación lo que estime oportuno. Mi regla siempre ha sido advertir a mis editores en papel de contenidos ya publicados en la red de que ahí estaban y ahí seguirían, y hasta ahora mis editores lo han aceptado y no parece haber afectado a las ventas.

Otro tema candente, las redes sociales. Usted conoce internet desde sus inicios y de la importancia entonces del anonimato en general. ¿Qué cree que aportan estas nuevas redes sociales con identificación?

Bueno, identificación relativa, porque están llenas de avatares que además, como cabe prever, son los más faltones. Para mí las redes son sólo una herramienta, útil si no se abusa ni se deja uno secuestrar por los objetivos de quienes las crean, financian y mantienen, que no siempre coinciden con los de los usuarios y a veces están frontalmente en contra.

¿Qué parte de culpa tiene la falta de confianza entre personas y de valores en general, en esta etapa de crisis? Y los medios de comunicación, ¿no tienen alguna responsabilidad en trasmitir constantemente el desánimo?

Los medios tienen que contar lo que hay, también lo positivo, pero esto no abunda en los últimos tiempos, qué se le va a hacer. La falta de confianza tiene que ver con el hecho de que la realidad nos ha enseñado que hay no pocas personas con escasos o nulos valores que no tienen inconveniente en traicionar la confianza que se deposita en ellos. Es lógico, y será una ardua tarea restaurarla.

¿Qué puede hacer la literatura por cambiar la dinámica de una sociedad?

Indagarla, contarla, y dejar que cada lector saque sus propias conclusiones sobre cómo puede mejorarse.

La nueva editorial “Playa de Akaba ” que acaba de lanzar tiene algún propósito de cambio en el panorama editorial actual? Cuéntenos brevemente este proyecto.

Es una editorial que busca espacios minoritarios: poesía, clásicos olvidados, nuevos narradores. Es un empeño romántico, pero esperamos convencer a algunos lectores, con libros cuidados por dentro y por fuera, de que también es un producto que merece la pena comprar.

¿Los escritores consagrados son conscientes de que hoy en día hay un “Genio plebeyo” emergente y de calidad que se autopublica y termina llegando a las editoriales a través de su éxito en Internet? Ese puede ser el camino en un futuro?

Sólo hasta cierto punto. El genio autopublicado no corrige sus errores ni mejora sus puntos débiles, algo que un buen editor le ayudaría sin duda a hacer.

Como escritor experimentado y conocedor de las nuevas tecnologías, déjenos por último algunos consejos positivos para escritores noveles que comienzan su andadura.

El mejor consejo es seguir el propio camino, trabajar duro por tus objetivos y utilizar los recursos a tu alcance, tecnológicos o no, con esa mira y esa meta. Cualquier otro consejo es una falta de respeto, de la que me abstendré.