Granada, 1924. Por Usue Mendaza

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Granada, 1924.

      En Días como aquellos, Granada 1924, PREMIO ANTONIO DOMÍNGUEZ ORTIZ DE BIOGRAFÍAS, el poeta y ensayista Alfonso Alegre Heitzmann (Barcelona 1955), nos sumerge con la maestría de un especialista del detalle poético, en los días de verano que disfrutaron con deleite y armonía tres figuras de la Música y de la Literatura españolas: Federico García Lorca, Juan Ramón Jiménez y Manuel de Falla. En este triángulo, equilátero (porque ninguno sobresale sobre el otro), de una madura relación de amistad epistolar entre los tres, el escritor nos adentra con la verosimilitud que le confiere su merecido premio, como se adentran los ojos en la sala de un museo de cuyas paredes cuelga el cuadro principal que domina con sagrada estética la íntima estancia, ojos expectantes de cualquier asombro que aplaque su curiosidad. Sumergirse en la intimidad de estas figuras icónicas en su propia quincena vacacional granadina, no es digamos un terreno allanado;  implica detrás de la edición y publicación del libro, una labor ardua de trabajo y de respetuosa investigación. Pero Alfonso Alegre hila fino, muy fino, experto como es de la obra juanramoniana.

 

      Es gracias también a su enorme vis poética y a los documentos fieles sobre los que trabaja, que el autor A.A.H, sabedor de la belleza en la cotidianidad del día a día, acude a un pasaje de las memorias de la hermana pequeña de Lorca, Isabel García Lorca, para retratar la verdad de un paraíso íntimo entre F.G.L y Manuel de Falla. Isabel cuenta lo que pasó en esa habitación bien de mañana, como el milagro de una felicidad, como la unión de dos magias especiales. Falla entra con una partitura en la mano, al parecer de Ravel, aunque ella no está muy segura. El compositor requiere una silla del comedor porque no resiste el taburete en el que se sienta Lorca al piano. Falla ríe con amplitud y generosidad, porque Federico no toca lo que está escrito, aunque para él es muy bueno. Isabel termina su testimonio agradeciendo a Dios el haber sido partícipe como único testigo ocular de ese momento vivido en aquella habitación, que es paraíso musical y poético gracias a la luz granadina y a la luz, convengamos, de sus moradores.

 

      Granada, que es intuición de lo bello y de lo trágico de la vida, vida y muerte de Lorca, agua y sed, torres sin guardián con vistas a la Vega, se convierte durante estos días tan especiales en la ciudad anfitriona. Y qué mejor que Granada para reunirles. Aunque es bien conocido que los encuentros ya se habían producido con anterioridad. A Juan Ramón, Lorca que se le acerca en Madrid y muy bien recomendado, por cierto, por Fernando de los Ríos, el joven poeta le causa al ya precursor de una nueva poética en España, una muy buena impresión. En cuanto a la relación de Falla con Lorca, el primero se instalaría “en Granada a mediados de septiembre de 1920” y la relación del primero con el segundo, se establecería al poco de que el músico se instalara en la ciudad.

      Del éxito de este rico encuentro a tres, da cuenta la génesis del libro poemario Olvidos de Granada del poeta de Moguer con su romance “El Generalife”, con dedicación a Isabel incluida, donde Juan Ramón acuna su agua que le llora y que le habla. Isabel le escribe una carta en la que demuestra una vez más su agradecimiento, esta vez no a Dios, sino a un buen amigo.

      La lectura de Días como aquellos no sólo es, por tanto, merecidamente aconsejable. Alfonso Alegre, halla, cuenta y comparte la felicidad de una verdad que ocurrió a tres amigos en la intimidad, pero que quiere, con respeto y de manera fiel, hacer ostensible y extensible a sus lectores, que seguro sabrán disfrutar del libro como niños con zapatos nuevos, en su primera visita a un museo, dispuestos al asombro.

 

USUE MENDAZA

Usue

Nace en Vitoria-Gasteiz en 1975. Titulada en Secretariado de Dirección por la Universidad de Deusto, Bilbao (1993-1996). Habla Inglés y Alemán . Aprende Francés. Siempre ha sentido curiosidad por el mundo cultural pero a sus 33 años despierta especialmente un enorme interés por la Poesía y por la Literatura. Con el Liceo Poético de Benidorm, de la que fue integrante, participa, además de en numerosos recitales por toda la provincia de Alicante, en la Antología VOCES EN AZUL con la Editorial Germania. Ha colaborado en el libro antologado DEL SILENCIO AL TEATRO DEL PARNASO, disponible en Amazon, en homenaje al poeta modernista hondureño Juan Ramón Molina, amigo de Ruben Darío. Están también sus letras en la Edición cuaderno impreso de 2012 y en la electrónica de Agosto de 2013 en DOS POEMAS Y UN CAFE, edición de J. SEAFREE. Escribe asiduamente reflexiones, relatos, artículos etc, para Canal Literatura y para su blog usuemendaza.wordpress.com. Actualmente reside y trabaja en la ciudad de Granada.

Un comentario:

  1. Confieso que fue este libro y no otro el que alivió mi confinamiento por el COVID, ya que me trasladó mágicamente a otro tiempo, algo de onírico y mucho de literario en Granada. Así que siempre le estaré agradecida. Próximamente estará su autor en Granada, concretamente el 14 de junio en el Palacio de Carlos V para una tertulia literaria. Las plazas están ya, y no sorpresivamente, agotadas.

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