Entretenimientos
¿Cómo estamos viviendo, en qué nos apoyamos para seguir viviendo? Juegos, películas, el gran negocio del ocio y los pasatiempos, libros, historias y relatos, ficciones, teatro , variedades, conciertos, un partido de fútbol…en la tele. Así vivimos, sin todo eso en lo que nos apoyamos para vivir no sabríamos qué hacer, nos parecería que no vivimos. Es distinto para Tarzán, ocupado todo el tiempo en sobrevivir, en saltar de un árbol a otro viajando rápido sobre las copas frondosas de los árboles. Era distinto para los vikingos, ocupados en construir sus barcos, en beber cervezas y saquear aldeas, en matarse unos a otros. Distinto era para los indios comanches, ocupados en cazar y guerrear contra el hombre blanco. Ellos no necesitaban entretenimientos, les bastaba con vivir su vida, la que les había tocado en suerte. Pero aquí me tienes, eligiendo que series ver, quedándome vacío y perdido cuando se acaba un episodio y de pronto me doy cuenta que estoy solo en mi cama, no queriendo pensar, no queriendo dormir, con la duda terrible acerca de si la realidad podría ofrecerme algo mejor que estas intensas y realistas evasiones. Soldados disparando, una historia que se desarrolla ante mis ojos a lo largo de quinientas páginas, lo que pensó y dejó escrito Kafka, las fotografías que hice en Praga. Tendría uno que irse a alguno de esos bosques en las altas latitudes, construirse una cabaña, tratar de matar a un oso o morir entre sus brazos, una buena muerte según los indios, buena muerte para poner la guinda a una vida sin necesidad de entretenimientos.
Máximo González Granados