«Skater» Camino A Casa («The Way Home»)
Para mi querido hijo Daniele.
Todo empieza con un salto.
Noche cerrada rota por el ruido de ruedas que te llevan con tu propio impulso.
Un viaje mágico que nos invita a deambular por calles y caminos. El sudor empapándote, poco a poco, mientras el cansancio va haciendo mella tras un esfuerzo prolongado.
En todo camino hay fotogramas en negro, pausas y silencios. Sin embargo, sigues impulsándote tras cada salto o caída, cambias de dirección, de pie o de maniobra. Esperas cuando otros pasan, los rodeas, subes y bajas escaleras y bordillos mirando al frente o atrás, ubicando tu marcha con sentido.
A veces, no queda otra que parar, andar y tumbarse mirando el cielo. Es necesario respirar hondo, encontrar la fuerza y volver a intentarlo: superar otro reto, otra encrucijada, algún miedo, alguna decepción, algún fracaso.
Pero tú sabes que no hay más impulso que el que de ti nace, ni otro propósito que llegar al destino por el que iniciamos el camino. Y, a pesar de tener destrozados pies y zapatos, sigues impulsando el trayecto porque el anhelo más fuerte es llegar cumpliendo. Llegar allí de donde partimos y ser abrazado por el descanso merecido, con la certeza de haberlo intentado con toda la pasión y la sensación de que todo empeño, a pesar de las desilusiones, ha merecido la pena.
A mi memoria han asomado estos versos de Jorge Manrique.
“Este mundo es el camino
para el otro, que es morada”
Hoy, viendo este vídeo, me he sentido skater, me he subido a tu tabla y he viajado junto a ti. Me ha dolido cada golpe y he disfrutado cada voltereta, esos segundos de ingravidez y alto vuelo.
Aunque las sombras acechen, nunca te sientas solo, cariño, porque siempre estaré acompañándote en ese viaje que nos devuelve al origen: El camino a casa (The way home).
Sabes muy bien cuanto te quiero.
Brujapiruja
26 de agosto de 2014
Corto vídeo: camino a casa («The way home») Javier Hernández
Muy hermoso, Luisa.
Gracias Ángel, los hijos son fuente inspiración siempre emotiva.
Un abrazo
Luisa
Para eso están las madres: para darles el primer impulso y morderse la lengua cuando caen. Pero, sobre todo, para mantener siempre abierta la puerta de casa.
Una preciosidad, brujita.
Un abrazo de skater.