EL VERDADERO HOGAR
Mirad este lugar,
tan desolado,
gente que pasa cubierta de polvo,
ignorando el escombro que se cae de los días,
que atraviesa el fantasma de las irrealidades,
que choca con la vida sin percibir el ruido
que produce la ausencia
al romper el cristal de los recuerdos.
La ciudad ya se inclina a las miradas
sujeta por la luz de las esperas.
Mirad este lugar, hoy es más nuestro
aunque nunca estuviéramos recorriendo su espalda.
Ahora que el semáforo se rinde
al ámbar de los párpados,
ya podemos cruzar la desmemoria,
descubrir que la vida es la costumbre
de romperse los ojos,
de abandonar la claridad,
de sumergir al tiempo en un vaso de tiempo.
El verdadero hogar no tiene números
que puedan ubicarlo,
pero basta escribir unas cuantas palabras
para ver al cartero deshojando en tu puerta
la flor de la distancia.
Mirad este lugar, hay unas ruinas
subiendo al autobús
y una parada
creciendo en el hogar del que te fuiste.
Luis Oroz
Blogh del autor
No sé si el cartero deshojará palabras en mi puerta tras cruzar un semáforo rendido al ambar de los párpados. Lo que sí que tengo claro es que en la poesía está tu verdadero hogar.
Un abrazo.