Lo que vendrá
Yo deberé olvidarte alguna tarde
o algún anochecer en el que viento
se lleve tu delicia y mi tormento
y al alba ya no pueda recordarte.
Y así como fogata que no arde
veré que el fuego ya perdió su acento
y la verdad de ayer, que es la que hoy miento,
no encontrará ni un pecho que la guarde.
Habrá una forma, una fatal manera,
y lo que hoy es… será por siempre «era»,
¿cómo decir?, un sueño que se ha ido,
una triste agradable desmemoria
que permita ignorar la breve historia
y lo que pude ser, y lo que ha sido.
Marcelo Galliano