Primera semilla
Creció bajo la luna.
Los senderos
abiertos por la lluvia entre las sombras
la vieron desvestirse de la nada,
ser huésped de lo oscuro.
Como verde esperanza tallecía
en busca de la luz, y los silencios
̶ sueño de savia y sol de las raíces ̶
tejían los instantes en su entraña.
El germen del amor
(dentro de un corazón inanimado)
puso en marcha el reloj del infinito.
Antonia Álvarez Álvarez