¡Silencio! Permite que hable el silencio,
cauto, quedo, lego, lúcido y tierno.
Escuchemos el rumor de una mirada
que nos recorre de arriba a abajo,
escuchemos el aliento de un gemido
que nos traspasa alado y ligero,
escuchemos una orquesta muda
cuyas lentas estridencias
nos acunan en el sosiego.
Más tarde, cuando nos entendamos,
hablamos, cuando descubramos el color del silencio.
Fátima Ricón Silva
precioso…precioso…preciosooo¡¡¡
Muy buenas facetas sobre el silencio, me impactó «escuchemos el aliento de un gemido».Cuando leo un poema de esta dimensión textual y emocional lo agradezco. GRACIAS
Betty